Jueces y verdugos en el Nuevo Ganzábal

Entramos en el tramo final. Solamente tres partidos para que la fase regular de Segunda RFEF eche el cierre hasta el próximo mes d septiembre. Una fase donde la mayor parte de los equipos se juega a cara de perro el cumplir sus objetivos o salvar otros distintos de la forma más digna posible. No es el caso de ninguno de los dos contendientes en el Nuevo Ganzabal este domingo a las cinco de la tarde.

El Unión ya llega a este duelo frente al filial blanquivioleta con su objetivo del año más que cumplido. La salvación ya es una realidad tras la victoria de la pasada jornada en el Nuevo Malecón de Torrelavega y lo que ocupa, que no preocupa, al conjunto de Javi Vázquez es lograr disputar la fase de ascenso. Su gran campaña le ha valido para ser actualmente quinto clasificado, dando unas prestaciones que pocos podían prever allá por el verano de 2023.

Frente a ellos un filial blanquivioleta qué ha sido, sin duda alguna, el más típico de los filiales. Irregular, viviendo de rachas y muchas veces de la inspiración de algunos de sus (muy) talentosos futbolistas para sacar adelante la campaña. Una cuyo objetivo estaba más en intentar pelear por arriba que por abajo. Sin embargo un mal inicio, con cese de entrenador incluido, le hizo sufrir y padecer para salir de la zona baja. Ahora, aunque no tienen la salvación cerrada, todo depende de ellos mismos.

Para dirigir este encuentro se ha designado a un colegiado con ciertas tablas y experiencia incluso en categoría superior como el gallego Gómez Lameiro. Pontevedrés de 30 años, se trata de un árbitro al que tanto Langreo como Promesas conocen bien. Al Unión lo ha dirigido en seis ocasiones con dos triunfos, un empate y tres derrotas. Con los pucelanos un precedente menos, pero un balance similar: dos victorias, un empate y dos derrotas.

Se espera un ambiente excepcional en el Nuevo Ganzábal. El equipo langreano prepara con mimo durante esta semana actos en la previa del encuentro para que la afición se congregue desde varias horas antes en el estadio. Anima a sus seguidores (abonados) a presenciar el encuentro de su equipo juvenil a mediodía y hacer previa en las cantinas del campo, donde se servirán viandas para hacer más llevadera la previa del encuentro con el estómago lleno. Todo por un encuentro clave para ambos y que ambos técnicos tendrán, al menos si no surgen contratiempos, a toda su plantilla a disposición salvo el caso de Sala en el Promesas, afianzado ya en el primer equipo con Paulo Pezzolano.