Nadie ha ganado ninguno de los últimos cuatro derbis entre el Betis y el Sevilla en competición oficial, con empate este domingo (1-1), igual que en la primera vuelta, también con igualada a uno; y en los dos de la pasada campaña, a cero y a uno. El equipo verdiblanco sólo ha ganado uno de los últimos doce choques o tres de los últimos 22 ante su ‘eterno’ rival de la ciudad.
Reina la igualdad en la ciudad de Sevilla. El derbi que tanto genera entre aficiones, acabó en empate por cuarta edición consecutiva. Los piques se deberán centrar en la clasificación, con el Betis séptimo y el Sevilla decimotercero, pero el partido dejó mayor pesar en los locales que en los visitantes. El objetivo de lograr plaza europea ante la satisfacción de sentirse ya lejos del peligro tras un curso para el olvido.
Extiende su mala dinámica en los derbis el chileno Manuel Pellegrini. Lo sintió cerca esta vez, con el penalti transformado por Isco Alarcón. Pero lo dejó escapar en una acción a balón parado que deparó el vuelo de Kike Salas y su inapelable testarazo. Un duelo que asegura la batalla, por encima del fútbol, la pasión y la tensión, en el que el Betis no supo sacar provecho de su mayor presencia ofensiva.