Últimamente siempre se ha hablado de lo que ocurre en las altas instancias del Valencia CF y no es para menos, para poner en perspectiva ayer reapareció en el palco -si es que alguna vez apareció- Khojama Kalimuddin. O traducido a lenguaje nuestro, el presidente del Consejo de Administración del Valencia.
Sea como fuere, y con todos los respetos hacia el hombre, no creo que sea hombre de futbol, lo que si se le ve es hombre de negocios, hombre de empresa, hombre de saber manejar la junta de una empresa; que hoy en día es en lo que está convertido el Valencia: una mera mercantil, donde lo deportivo poco importa.
Bueno, poco importa a los de arriba, pero a los cuarenta mil que van a Mestalla todas las semanas si que les importa, y es que esta temporada el equipo ha arrancado con cinco puntos de los últimos dieciocho (5/18) habiendo ganado y empatado los dos últimos partidos en Mestalla.
Según el Pipo, llevar cuatro de seis es algo que ha cambiado la tendencia en este Valencia, y aunque bien es cierto que has cerrado la portería en los dos últimos partidos en Mestalla, en ataque el equipo sigue siendo deficiente.
El otro día el plan de partido estaba claro, juntas las líneas e intentar salir al contragolpe, cosa que verdaderamente consiguió, pero frente a Osasuna el equipo tuvo un “debe” grande, y fue el de no saber como hacerle daño al rival. En defensa muy bien, pero el ataque fue estéril, y jugando en casa, frente a un equipo que sabías a lo que te ibas a enfrentar, creo se le debe exigir algo más al Pipo en ese aspecto táctico.
Cierto es también, que los cambios primeros (Guerra y Fran Perez) podían ser ofensivos y de refresco, pero Fran no estaba en forma y Javi no supo por donde le venía el viento. Y, al final esto es algo que tampoco se le puede echar en cara al ‘pipo’, tiene limitaciones en el banquillo, sí, y no es culpa suya porque ahora al futbol los banquillos juegan un papel importante.
A partir de ahí, hablar de cambio de tendencia quizá pueda sonar un poco exagerado, pero verdaderamente jugando en casa podía haber propuesto algo más, y ahora veremos si algo ha cambiado en Donosti, el sábado, cuando se viaje a un campo complicado contra un mejor equipo que no ha empezado de la mejor manera por un cambio de ciclo.