¡Con pie y medio en cuartos de final!
En ausencia de Neymar y Cavani, un Di María pletórico cogió las riendas para doblegar a su ex equipo
Volvía la Champions League a Old Trafford, y lo hacía en un gran momento para los locales tras la imbatibilidad conseguida con la marcha de José Mourinho y la llegada de Ole Gunnar Solskjaer. El cambio de entrenador había producido el efecto deseado por los dirigentes del club, los jugadores parecían conectados a las directrices del nuevo entrenador y todo marchaba según lo previsto, los resultados hablaban por si mismos, 9 victorias y tan solo un empate concedido bajo el mandato del entrenador danés.
Dicha imbatibilidad, sumada a las importantes bajas de Neymar y Cavani en el conjunto parisino hacían cambiar la condición de favorito que había obtenido el PSG el día del sorteo. Las expectativas estaban por las nubes en los seguidores británicos, todos afirmaban ganar el primer encuentro de la eliminatoria fácilmente, el resultado más repetido entre los red era el de 2 a 0 a favor de los diablos rojos. Ninguno de estos seguidores contaba con que habría un actor secundario que les haría levantar la voz como nunca antes lo hizo en la temporada en la que pasó con más pena que gloria por la banda izquierda del teatro de los sueños.
La primera parte fue de auténtico rigor táctico, los guardametas apenas tuvieron trabajo en los primeros 45 minutos, la única parada que pudimos apreciar en este primer acto fue la de Buffon, que a sus 41 años detenía un inesperado latigazo de Marcus Rashford que parecía colarse por el lateral de la portería. Cuando el arquero italiano debutó en champions, el delantero inglés todavía no había nacido.
El PSG dominaba y el Manchester United intentaba arrebatarle el esférico por medio de una alta presión, Marco Verratti comandaba el centro del campo mientras que Paul Pogba perseguía sombras, muy lejos del nivel mostrado en la Premier League tras el cambio de entrenador. En los compases finales del primer tiempo el entrenador local se vió obligado a realizar dos cambios por lesión, dando entrada a Juan Mata y Alexis Sánchez en lugar de los lesionados Anthony Martial y Jesse Lingard, con el empate inicial alcanzabamos el descanso.
El segundo acto vino marcado por la irrupción de Ángel Di María, el argentino aprovechó las 2 ausencias más que notables de Neymar y Cavani para tirarse el equipo a la espalda y demostrar a todos los reds que le abucheaban durante todo el encuentro, debido al gran desembolso que se hizo por él y al pobre nivel que mostró en la temporada que estuvo como local, de que es un jugador más que válido para triunfar en estas ocasiones. Gracias al gran desarrollo táctico de Tuchel, con músculo en la medular (Marquinhos y Verratti) y dotando de libertad al astro argentino y a Mbappé, el conjunto galo pasó por encima de los ingleses. Estó se reflejó en el minuto 53 cuando Presnel Kimpembe remataba completamente solo en el área pequeña un magistral servicio de esquina a cargo de Di María, el mismo que 7 minutos más tarde y tras una gran jugada con el español Bernat, ponía en bandeja el segundo tanto del encuentro para el joven Mbappé, que con su endiablada velocidad dejaba atrás a los centrales reds para poner el balón al fondo de la red.
Tras este resultado y sumando la sanción que acarreará Pogba debido a su doble amarilla, los diablos rojos se encuentran más que maniatados y podríamos afirmar que la eliminatoria se encuentra muy encaminada para el conjunto parisino.
Ficha técnica:
Manchester United: De Gea; Shaw, Lindelof, Bailly, Young; Matic, Herrera, Pogba; Martial (Mata), Lingard (Alexis Sánchez), Rashford (Lukaku).
Paris Saint Germain: Buffon; Kehrer, Thiago Silva, Kimpembe,Bernat;Verratti (Paredes), Marquinhos, Draxler, Alves; Di María (Dagba), Mbappé.
Goles: 0-1.Kimpembe, min 53, 0-2. Mbappé, min 60
@rivalex11