Murcia se lleva un partido en Zaragoza de muy poco baloncesto

Decimotercera jornada de Liga ACB en un ambiente prenavideño. Partido disputado entre Zaragoza y Murcia con muy poco baloncesto por ambas partes en un choque anodino y soporífero por momentos. Murcia por delante del marcador casi todo el encuentro y Zaragoza incapaz de reaccionar y tomar el mando. Aun teniendo opciones al final, los maños han demostrado que están en una dinámica preocupante. Por su parte Murcia sigue intentando engancharse al tren de la Copa del Rey.

Cada equipo empezaba el partido con sus propios objetivos diferenciados. Zaragoza afrontando sus partidos más vitales para escapar de los puestos de peligro y Murcia aspirando a metas mayores. Con esto se iniciaba el choque con un UCAM mucho mejor plantado en el parqué zaragozano y sabiendo encontrar los puntos débiles de un excesivamente inocente Tecnyconta. Demasiada debilidad defensiva de los de Jota Cuspinera que sabían aprovechar los murcianos con constantes puertas atrás culminadas con comodidad especialmente por un inspirado Tumba. La batalla se trasladaba a la pintura y ahí ganaba la partida claramente Murcia. Los zaragozanos se veían desbordados y sin argumentos ofensivos para poner en apuros a los pimentoneros. Mediado el primer cuarto los visitantes ya iban teniendo una cómoda renta que iban a mantener casi todo el partido (5-12). Varnado se mostraba demasiado impreciso y el resto de compañeros no estaban mucho más acertados. Sólo la reciente incorporación Bo McCalebb parecía tener algo de verticalidad. Al final del primer cuarto 16 a 22 gracias a una tímida reacción local.

El público presente en el Príncipe Felipe esperaba una reacción de los suyos en el segundo acto pero esta no iba a llegar. Más imprecisiones locales, a las que se iban a ir sumando poco a poco las de los murcianos también. El partido iba entrando en un ir y venir de ataques fallidos, balones perdidos y jugadas absurdas. De Jong por los locales y Lukovic por los visitantes eran los únicos que iban sumando puntos al encuentro. La diferencia seguía oscilando los ocho puntos, insuficiente para dar el partido por sentenciado pero válida para que UCAM pudiera desenvolverse con relativa tranquilidad. Al descanso 29 a 35 en lo que sería un resultado abierto si no fuera por lo que se iba viendo en la pista.

Tras el parón del descanso no iba a mejorar el panorama para los maños. Sólo Mc Calebb y un gris Gary Neal parecían estar en lo que se jugaba en el partido de hoy. Del lado visitante Hanna se iba destapando para dar puntos para su equipo. Los errores seguían condenando a los de Jota que llegaban a estar trece puntos en desventaja al poco de comenzar este tercer cuarto. Neal se echaba la tarea anotadora de su conjunto a las espaldas y peleaba por no dar la batalla por perdida… hasta que se lesionaba. Pintaba mal la lesión y más aún el partido cuando se perdía a la única luz en el horizonte zaragozano en un partido con bastantes sombras. Con todo, al finalizar el periodo, seguía la diferencia de ocho puntos, 50 a 58.

Con todos los factores a favor de los de Murcia, contra todo pronóstico, se les iba a complicar el partido en el último cuarto. Basado en una mejor actitud defensiva Zaragoza se quería meter en la lucha por la victoria. Un renacido Varnado, tras una bronca con Cuspinera, y un voluntarioso Jonathan Barreiro llevaban a los suyos a empatar el encuentro a 67 puntos a falta de poco menos de tres minutos para el final. Poco antes todo el pabellón había vivido en vilo un desvanecimiento de Rojas en la pugna por un rebote ofensivo. El jugador estuvo inconsciente poco más de un minuto y todos los allí presentes con el corazón en un puño. Al final todo se quedaba en un susto sin mayores consecuencias. Con el encuentro empatado y poco más de dos minutos por disputarse, los despropósitos se iban a alojar de uno y otro bando. Más lucidez de Murcia que a base de tiros libres conseguía distanciarse de un Zaragoza que de nuevo se mostraba espeso y ofuscado en ataque.

Mal partido de baloncesto por parte de ambos equipos en el que ha ganado el que menos mal ha sabido hacer las cosas. Preocupante dinámica en la que se ve entrar a Zaragoza. Hoy se han escuchado silbidos en el pabellón reclamando una mejor actitud en los locales. Por su parte Murcia no ha tenido mucho brillo en su juego y ha dado la sensación de que es un bloque que puede rendir más de lo que ha puesto hoy en el parqué zaragozano. Tanto uno como otro deberán de aplicarse a hacer mejor las cosas si quieren optar a lograr sus objetivos respectivos.

Imagen principal y destacada: Basket Zaragoza/ Esther Casas