El trío letal del Real Madrid en los playoffs de Euroliga
El Real Madrid ha hecho los deberes en el WiZink Center ante Panathinaikos con tres jugadores protagonistas: Facundo Campazzo, Jeffery Taylor y Klemen Prepelic.
El Real Madrid ha salido exitoso de los dos primeros partidos de los playoffs de la Euroliga disputados en el WiZink Center. Ahora, con la serie trasladándose al Olympic Sports Center Athens, deberán rascar un partido de Atenas si quieren acceder a la Final Four y evitar que la serie vuelva a Madrid. Capital importancia tendrá por que esto no ocurra los tres principales verdugos de Panathinaikos: Facundo Campazzo, Jeffery Taylor y Klemen Prepelic.
Con la ausencia confirmada por Pablo Laso de Sergio Llull, uno de los mayores estandartes del Real Madrid y del baloncesto europeo, el peso de la dirección del equipo caía en un Facundo Campazzo que ha madurado como jugador y se ha encargado de deslumbrar al mundo. En el primer partido se mostró «discreto» sobre la pista del WiZink Center, con ocho puntos, cuatro rebotes, seis asistencias y un robo para 18 de valoración.
Pero, sin lugar a dudas, se encumbró en el segundo partido: 13 puntos, nueve asistencias, siete rebotes y cinco robos (la mejor marca de los últimos siete años en los playoffs) para 26 de valoración. Un escándalo baloncestístico el demostrado por Facundo Campazzo, que se ha elevado al nivel de uno de los mejores bases de Europa. Un talento ofensivo, pero también defensivo, tal y como pudieron comprobar Nick Calathes y Keith Langford a lo largo de ambos partidos. Hasta Rick Pitino se rindió al argentino.
«Facundo Campazzo es un niño pequeño y duro». En una jugada, nuestro ala-pívot subió con él por un balón suelto en un rebote, y él sacó el balón. No sé qué tan alto es, 1.76 o 1.79, pero le quitó una bola por encima de un chico de 2.04 o 2.07. Es un tipo duro, juega duro, juega de manera inteligente, muy buen jugador de pick and roll, y su esfuerzo es fantástico».
Facundo Campazzo ha conseguido eclipsar a dos de sus compañeros, sin los cuáles no se entendería este 2-0 del Real Madrid. Estos son Jeffery Taylor y Klemen Prepelic. Aunque el sueco siempre ha sido catalogado en el formato de jugador de corte muy defensivo y que en números poco abultados de tiros saco el máximo rédito posible, la explosión del alero en estos playoffs es significativa.
Jeffey Taylor llegaba a los playoffs con una misión clara: frenar a Nick Calathes. Esta misión la ha cumplido con creces, al igual que el resto de compañeros cuando el sueco tenía que descansar. Lo que nadie se esperaba es que fuese uno de los máximo artífices del equipo: 13 puntos con 3/6 en triples en el primer partido y 11 puntos con tres triples sin fallo en el segundo. La mejor versión del ex NBA, por el cual Pablo Laso siempre ha apostado.
El último protagonista ha sido el más inesperado. Sin Sergio Llull, Pablo Laso ha apostado como sustituto de Facundo Campazzo por un Klemen Prepelic que jamás había jugado de base. Aunque por ello se le ha llegado a criticar y se veía al esloveno menos brillante que lo que demostró en el Eurobasket que ganó con Eslovenia, estos playoffs le han dado la razón al técnico vitoriano.
Klemen Prepelic ha dirigido al equipo, ha dado calma al juego y ha buscado y leído las mejores situaciones ofensivas, ha defendido a alto nivel (algo que siempre le ha exigido Pablo Laso), y, encima, ha sido capaz de anotar puntos importantes y sumando desde el triple. Buena muestra de ello son los nueve puntos al descanso que anotó en el segundo partido, colocándole como el máximo anotador del Real Madrid.
A la espera de que los grandes nombres como los de Walter Tavares, Anthony Randolph o Rudy Fernández vuelvan a aparecer en escena, porque lo harán, esta pequeña sociedad ha sacado las castañas del fuego al Real Madrid con apariciones estelares en los dos primeros partidos de playoffs de la Euroliga.