Racing y Fuenlabrada juegan la eliminatoria de la resaca

¿Quien le manda al Racing de Santander y al C.F. Fuenlabrada jugar este partido? Tras haber conseguido el  objetivo y con el verano ya acechando, los dos ascendidos a LaLiga 1|2|3 tienen que disputar la eliminatoria de campeones para conocer el campeón de la categoría en la que ninguno de ellos militará el año que viene. El encuentro que tendrá poca importancia será arbitrado por el colegiado balear Sebastián Ripoll Solano.

Los dos consiguieron el ascenso el domingo, los dos han tenido una larga celebración y los dos quieren acabar cuanto antes. El sorteo dijo que la ida iba a ser en tierras madrileñas y la vuelta en Santander. Sin embargo, como el conjunto cántabro quería hacer una especie de fiesta el domingo, cambiaron el orden y la vuelta será el miércoles en el Fernando Torres para acabar antes.

Es un partido incómodo, aunque más que incómodo, innecesario. Los dos han logrado su objetivo pero hay que decidir quién es el campeón de Segunda ‘B’. La recompensa es un pequeño premio económico que no saca de nada a ninguno de los dos equipos. No obstante siempre quedará el prestigio y el orgullo por ser campeón de categoría. Los dos así pondrían el broche de oro de una temporada perfecta.

Lógicamente es un partido que ninguno de los técnicos tiene previsto forzar a nadie. Saben que sus jugadores vienen de un esfuerzo físico enorme por lograr el ascenso y lo normal es que den minutos a los menos habituales. Tanto en este partido como en el de vuelta, los dos equipos buscarán ganar pero no con sus onces de gala.

Iván Ania tiene las lesiones de Tresaco, Jon Ander y también Kitoko que se lesionó en el entrenamiento del jueves. Tampoco estará para toda la eliminatoria, aunque este es por sanción, Álvaro Cejudo tras ver la tarjeta roja en Palma de Mallorca con la que le han castigado dos partidos. Por su parte, Mere no tiene jugadores destacables que no puedan formar de la partido pero es posible que rote en todas las líneas.

En cuanto a las entradas, los socios verdiblancos están obligados a pagar 5 euros para poder presenciar el partido. Mientras, cualquiera que quiera acercarse a ver el choque podrá sacar un entrada entre 10 y 20 euros. A lo mejor por haber poco en juego quizás veamos más juego en las áreas y el público disfrute.