El Barcelona fuerza el cuarto con un final apretado (2-1)
El Barcelona se impone al Real Madrid 78-77 y pone el 2-1 en la eliminatoria para salvar el match ball. Gran partido de Thomas Heurtel, con 21 puntos, un rebote y cuatro asistencias.
Tercer duelo de la final de la ACB y primero en el Palau Blaugrana tras llevarse el 2-0 el Real Madrid del WiZink Center. El Barcelona, obligado a ganar si quiere seguir con opciones de levantar un nuevo título, a pesar de que históricamente nadie lo haya logrado.
Trey Thompkins abre brecha en un igualado partido
La tónica fue bien diferente al segundo partido. Ambos equipos abrieron rápido la lata y anotaban con facilidad. Los protagonistas, diversos, pero baloncesto puro con los duelos físicos muy intensos. De tres en tres iban sumando ambos equipos. El Barcelona buscó abrir huecos con Pierre Oriola de cinco, y el Madrid se encomendó a Walter Tavares y al triple. 8-13 tras cinco minutos de juego.
El Madrid abrió la pintura para que el Barcelona se ganase las habichuelas entrando al aro. Los blancos querían evitar ante todo que sumasen de tres en tres los blaugranas, faceta en la que, en casa, son muy fuertes. Las transiciones ofensiva eran el principal arma, y la pintura sólo empezó a ser productiva cuando Ante Tomic se emparejó con Gustavo Ayón. 19-18 tras acabar el primer cuarto.
Las mandarinas ? de @23Llull llegan al Palau Blaugrana
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La inercia del Real Madrid de permitir que el Barcelona cortase al aro es la cantidad de tiros libres en contra. Ocho tirados en el primer cuarto por los cero de los blancos. El protagonismo caía en un Ante Tomic que, sin Walter Tavares, hacía daño en la pintura. Se sumó a la fiesta Thomas Heurtel, y Pablo Laso respondió con un small ball con Facundo Campazzo, Sergio Llull y Jaycee Carroll de exteriores. A cinco minutos de descanso, mandaba el equipo blanco 27-28.
La igualdad era máxima entre ambos equipos. Las ventajas eran mínimas, y se recuperaban rápidamente cuando uno u otro se escapaban. Un parcial de 2-14 ponía al Real Madrid 29-35 a falta de dos minutos y medio, con Trey Thompkins y Facundo Campazzo como protagonistas. La defensa madridista, en apogeo, secó a un Barcelona corto de ideas en ataque. Este arreón valió para poner el 32-40 en el marcador del Palau Blaugrana al descanso.
Thompkins, gran partido desde el perímetro. #PlayoffLigaEndesa pic.twitter.com/hF11PNdyYg
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Thomas Heurtel levanta al Barcelona
Hilaba muy fino a la vuelta del descanso el Real Madrid. El triple de Jaycee Carroll para ganar el segundo partido había insuflado una vida extra a los blancos, la que le habían quitado al Barcelona. Sólo Thomas Heurtel ponía algo en pista por los blaugranas, pero se le acabó yendo la cabeza con Rudy Fernández y llegó el +11 (38-49 a fata de 7:30). Aunque duró poco, con el triple de Kyle Kuric y una canasta del francés, sumado a unas grandes defensas. Parcial de 10-0 y 48-49 a falta de cinco minutos para el último cuarto.
Con Gustavo Ayón en pista volvió a jugar Ante Tomic y a hacer daño. Walter Tavares secó al croata, pero el mexicano sufría. Y si no era el pívot, era Thomas Heurtel, que destrozaba al Real Madrid penetrando al aro. El cuarto estuvo marcado por el alto porcentaje de tiros de tres puntos, en lo que los blancos conseguían recuperarse con Jaycee Carroll. 56-58 a falta de la última batalla.
La antideportiva de Heurtel. #PlayoffLigaEndesa pic.twitter.com/be2BfQIExl
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El Real Madrid lo tenía en su mano. Entrando con ventaja en el último cuarto, la gestión de los ataques, de los cambios y de la defensa se tornaban fundamentales para la consecución del título. Facundo Campazzo se tiró el equipo sobre su espalda, opositando para ser el MVP de la final de la ACB, junto a un Trey Thompkins con la mano caliente desde el triple. 66-71 a cinco minutos de decidir campeón o forzar el cuarto.
El Barcelona se tenía que agarrar a cualquier clavo ardiendo, pero el Real Madrid era una máquina implacable. Sumando triples, uno de los ADNs del esquema de Pablo Laso, vivían los blancos. A pesar de eso, los blaugranas no tiraban la toalla y entraban sólo un punto abajo (76-77) a falta de minuto y medio. La experiencia y la paciencia debían aparecer en el Palau Blaugrana.
Metió Chris Singleton una entrada a falta de 29 segundos para el 78-77. Pablo Laso pidió tiempo muerto y se la jugó a una sola posesión. Sergio Llull falló la entrada con una posible falta de Víctor Claver. Adam Hanga capturó el rebote, pero perdió el balón por línea de fondo. Una última posesión para el Real Madrid. Y no la aprovechó. Facundo Campazzo entró a canasta, falló, Trey Thompkins palmeó el rebote sólo e incomprensiblemente falló. Habrá cuarto partido.