El difícil encaje de Coutinho en el Barcelona
A falta de pocas horas para que cierre la ventana de fichajes de verano en la Premier, circulan numerosos rumores que sitúan al azulgrana Philippe Coutinho en Arsenal o Tottenham
Fichado como el hombre que había de romper líneas, de surtir de balones a Messi o Suarez, de dar el llamado ‘último pase’, Coutinho ha ido teniendo, en el año y medio que lleva en can Barça, cada vez menos protagonismo y, cuando lo ha tenido, casi nunca ha rendido al nivel esperado. Su estadística de balones perdidos en muchos partidos, por poner solo un ejemplo, es alarmante.
Y la presente situación del brasileño, nos conduce al debate de porqué un jugador como Coutinho, de calidad indudable, no consigue triunfar en este Barcelona; máxime cuando otro futbolista, también de calidad excelsa y en teoría fichado para el mismo puesto, aunque con diferentes características, como el turco Arda Turan, se ‘estrelló’ también hace no mucho tiempo en la Ciudad Condal.
Se estructura hace ya hace muchos años el Barcelona en un 4-3-3 muy claro como punto de partida; todo lo claro que puede ser un esquema donde se tenga a Leo Messi (donde digo Messi, dígase Di Stefano, Cruyff, Pelé o Maradona… jugadores que juegan de todo y no juegan de nada… jugadores que son un equipo completo en sí mismos): cuatro defensas, tres medios (un pivote y dos interiores, aun con características diferentes) y tres delanteros; o dos delanteros (uno para ocupar la referencia central y un extremo)… y Messi.
Y el caso es que, si tomamos como base el excelso equipo de Guardiola, el Barcelona está teniendo serias dificultades para encontrar recambios a jugadores que, sea por tema de DNI, sea por otras cuestiones, van abandonado el equipo. Aún no ha encontrado un verdadero sustituto para Alves (un lateral profundo que defienda y llegue a línea de fondo); tampoco al relevo de Puyol y/o acompañante de Piqué; si bien ha de reconocerse en este punto que sí al de Abidal en el lateral izquierdo, en la figura de Jordi Alba (mejorando bastante al francés, por cierto).
Y en la línea ofensiva y a base de desembolsar las correspondientes millonadas y pese a algún que otro tropezón, también ha ido el Barcelona sabiendo gestionar las bajas de Eto’o, Henry, Ibrahimovic… entre otros. Pero el verdadero talón de Aquiles del Barcelona, a la hora de buscar reemplazos, no nos engañemos, está en el medio campo: Dios dirá lo que ocurrirá el día que se retire Busquets (parece nadie se ha parado a pensar aún en eso y empieza a ser un tema acuciante) pero ya tiene encima de la mesa el equipo azulgrana, hace varios años, el tema del reemplazo (en posición; jamás en calidad) de los míticos Xavi e Iniesta. Al margen de ciertas variopintas opciones no fructificadas (canteranos, en su mayoría) y a la espera del rendimiento que pueda dar el holandés de Jong, Rakitic está dando un rendimiento notable y el brasileño Arthur, llegado el pasado, parece tener lo que se ha dado en llamar ‘ADN Barca” y ha cumplido con creces (otra vez, lesiones mediante) en su primera temporada.
Pero, para encontrar (más) alternativas a aquel CORAL mediocampo que era el formado por Busquets, Xavi e Iniesta (eran los tres unos ‘currantes’ del balón, pero, obviamente, nadie les distinguiría por eso), necesita el Barcelona MUCHO más. Y es esa la perpetua búsqueda del Barcelona hace varios años. Busca el Barcelona imaginación y talento, pero también trabajo, en mediocampo. Y es que aquel Barcelona, coral y excelso done los haya, no necesitaba ‘trabajo’ como tal en mediocampo; le bastaba con otras cosas, para arrasar en este fantástico deporte de la pelota redonda y la portería.
Y aquí es donde entran en liza Arda Turan, fichado del Atlético de Madrid en el verano de 2015 y cuyo paso por el equipo blaugrana fue un desastre casi sin paliativos, y el brasileño Coutinho, que llegase a can Barça hace un año y medio. Y es que ambos jugadores, los dos con una técnica excelsa, pero con características muy diferentes, comparten o han compartido problema en el esquema táctico del Barcelona de los últimos años: en lo que referido al esfuerzo y al posicionamiento táctico como tal, no dan la talla para ocupar para ocupar el puesto ACTUAL de interior en el Barcelona (se requiere alguien con más capacidad de trabajo y sentido táctico) y, si la alternativa es situarles en ataque, en uno de los puestos con lugar teórico de partida en las bandas, no son mejores que ninguno de los tres de delante… llámase Messi (obviamente), Suarez, Neymar o Dembelé… actualmente y a la espera, igual que con de Jong, de la integración y desempeño de Antoine Griezmann.
Y es que, como decía Radomir Antic hace algunas semanas, hablando precisamente de Griezmann, el Barcelona de hoy no juega con mediapuntas; y tanto Arda como Coutinho (y Griezmann) lo son. Y, para bien o para mal, no parecen encajar en este Barcelona.