Rodrigo Moreno, la clave de sol valencianista
En cualquier puzzle que se precie siempre hay una pieza que facilita el encaje de todas las demás. No es el director de orquesta pero es un solista que da el tono de la música valencianista.
Rodrigo Moreno es, junto a Dani Parejo, la piedra filosofal del juego de transiciones rápidas que practica el Valencia de Marcelino García Toral. Pese a la irregularidad de sus primeras temporadas a orillas del Turia, el técnico asturiano nunca dudó de mantenerlo en la plantilla valencianista la temporada de su llegada a la entidad de Mestalla.
Marcelino defiende a su jugador
Las manifestaciones del entrenador astur dejan bien a las claras la importancia de un jugador diferencial como el hispano-brasileño. No es un gran goleador ni un rematador consagrado pero su contribución al juego vertiginoso es incuestionable.
Sus cualidades acoplan como anillo al dedo en esa filosofía. Se mueve perfectamente como enlace entre la media y el punta de referencia. Se desplaza a bandas para realizar permutas con los jugadores que desde allí buscan posiciones interiores. De ello se aprovechan constantemente tanto el jugador luso escorado a la izquierda como Carlos Soler partiendo desde el lado contrario. Descarga bien el juego al primer toque y conduce el balón con la velocidad y precisión necesarias para que los contraataques sean letales, mortales de necesidad.
Hace mejores a sus compañeros
Su visión de juego le permite también buscar los pases al espacio tanto para Gameiro como para Guedes, dos de los máximos exponentes de ese estilo del que hablábamos anteriormente. Como delantero de referencia tiene más dificultades para fijar la presencia de los centrales contrarios y su rendimiento merma considerablemente.
El Valencia es menos valencia sin él
Su salida, en palabras de Marcelino, provocaría un cambio en los objetivos de la temporada del equipo. La necesidad de buscar un jugador de las mismas características en un mercado inflacionado sería un factor en contra para la dirección deportiva dado que a estas alturas de verano, son pocos y caros los jugadores disponibles.
La dirección deportiva tiene alternativas
Las posibles alternativas a la marcha del delantero de la selección española parecen claras y ninguna de ellas alcanza la capacidad combinativa de Rodrigo Moreno. Thauvin es veloz y tiene gol pero el jugador del Olimpique de Marsella no combina ni se asocia con la facilidad que sí lo hace el actual ocupante de esa zona de tres cuartos. Bakambu destaca por lo mismo que el francés pero está más acostumbrado a jugar por zonas centrales. Su periplo por la liga china puede haber disminuido su rendimiento o su capacidad para competir al más alto nivel. Timo Werner sería lo más semblante en las opciones que ofrece el mercado pero también da la impresión de ser la más improbable por precio y por la sombra del Bayern Munich, quien parece tener atada su contratación al final de esta temporada.
@VicentSarrion