La dupla Vinicus Jr.-Rodrygo ya gana partidos para el Real Madrid
El Real Madrid ha vencido 2-0 a Osasuna en un partido serio e intenso de los de Zinedine Zidane. Goles de Vinicus Jr. y de Rodrygo.
Partido de confirmación para ambos equipos en la jornada seis de LaLiga Santander. Mientras el Real Madrid tenía que demostrar que se había recuperado y va en serio a por LaLiga, Osasuna debía mostrar que no sólo conseguía sumar en casa. Un partido con rotaciones por parte de Zinedine Zidane y que prometía espectáculo.
Otro Real Madrid serio sobre el césped
Muchas caras poco habituales en el Real Madrid, desde el debutante Alphonse Areola en portería hasta Luka Jovic de titular en la delantera. El plan, eso sí, le funcionaba a Zinedine Zidane. Control del partido y de la posesión, además de jugadores sacrificados que iban a morder en cada balón. Eso no quitaba que Osasuna le perdiese la cara al partido. Los hombres de Jagoba Arrasate no tenían ningún miedo a ir arriba a buscar el gol cuando disponían del balón.
A pesar de que el Real Madrid parecía tener el partido bajo control, no conseguían materiarizarlo en ocasiones. Osasuna estaba bien plantado en el campo, se proyectaba en ataque con Marc Cardona y Brandon, y no tenía problemas en esperar un contragolpe tras estar encerrado atrás. Eso les valió para empezar a sentirse más cómodos sobre el césped según iban pasando los minutos.
El primer gol casi cayó en el Santiago Bernabéu en el minuto 18. Álvaro Odriozola rompió por la derecha en una carrera de más de 70 metros hasta línea de fondo, centró y Roncaglia, en un intento por despejar, casi anota en propia meta ante la parada de Rubén. En la segunda oportunidad, Luka Jovic sólo pudo tocar el balón lo suficiente para que se fuese por encima del larguero. Y apenas un minuto después, Toni Kroos, a pase del delantero, probó fortuna desde lejos con la zurda, pero el balón salió lamiendo el palo.
Los minutos de la primera parte iban pasando sin apenas ocasiones. El partido era uno de esos típicos de mediocampo, uno de esos que se guerrean en el mediocentro y cuyo ganador consigue avanzar hacia la portería. Importancia capital para no perder esa batalla cogieron Fran Mérida y Fede Valverde, protagonistas absolutos del despliegue físico de ambos equipos. Alphone Areola y Rubén eran meros espectadores del encuentro.
Como ya pasó en Sevilla, el Real Madrid estaba realizando un partido muy serio. Sin apenas concesiones, centrado en el juego, sin perder la cabeza…Y así fue como llegó el gol, en el minuto 36. Toni Kroos condujo el balón hacia delante, dejando atrás a varios rivales, y filtró a la derecha a Vinicius Jr. El brasileño, que llevaba ocho meses sin meter un gol con el equipo blanco, se perfiló y puso un balón en la escuadra del palo largo al que nada pudo hacer Rubén. 1-0.
El Real Madrid quería más. Se sentía cómodo sobre el césped, sabiéndose dueño del partido, y atando en corto a un Osasuna que se diluía según pasaban los minutos. Sobre todo de la mano de Vinicius Jr., motivado tras el gol, y al cuál empezaban a salirle las cosas. Con susto incluido en el minuto 45, con la intervención magistral de Alphonse Areola en un mano a mano con Marc Cardona, se llegó al descanso con el 1-0 en el marcador.
Rodrygo se come el Santiago Bernabéu
Aunque el Real Madrid hubiese dominado la primera parte, no debía relajarse en la segunda. El 1-0 del marcador no era suficiente ventaja como para tener desconexiones como las vistas ante el Levante, precisamente en el mismo escenario. Para ello, los hombres de Zinedine Zidane debían mantener la concentración y la intensidad los 45 minutos restantes.
Osasuna se fue arriba, presionando alto y buscando rapidez. Y casi le cuesta caro. En el minuto 50 pudo matar a medias el encuentro Luka Jovic. Roncaglia tuvo una grosera pérdida en zona defensiva, y propició un 2vs2 entre Lucas Vázquez y el delantero contra el central y Raúl Navas. Finalmente, y en el mano a mano con Ruén, el serbio no atinaría con la zurda y mandaría el balón por encima de la portería.
El trabajo de todos los jugadores del Real Madrid era digno de ver. La derrota contra el Paris Saint-Germain despertó a unos jugadores que necesitaban recuperar la intensidad para volver a competir al máximo nivel. Es lo que tiene la vida sin Cristiano Ronaldo, que nadie te soluciona los partidos él sólo.
En el minuto 58 no perdonó Luka Jovic, aunque fuese anulado por el VAR por fuera de juego. El especialista dentro del área sólo podía permitirse fallar una vez. De nuevo en otra pérdida en el centro del campo de Osasuna hizo daño el Real Madrid. Y, de nuevo, los mismos protagonistas. Lucas Vázquez recuperó, condujo, filtró al serbio en el costado izquierdo y con un suave toque la metió dentro de la portería de Rubén. Noche negra para el 18 del equipo blanco.
La unidad B cumplía con Zinedine Zidane. Trabajo, constancia, dominio, posesión… Unos decálogos que seguro el técnico francés ha intentado calar en sus jugadores. Todo lo contrario a un Osasuno que sólo creaba opciones de peligro en contragolpes y jugadas a balón parado, en las cuáles apenas se exigía a un Alphonse Areola que se estaba ganando al Santiago Bernabéu con su seguridad bajo palos.
Quien sí que sentenció el partido fue Rodrygo, nada más entrar al campo. Casemiro cambió de banda derecha a izquierda al extremo, el cuál no dudó en encarar a portería. El brasileño condujo, se perfiló a su pierna buena, y batió al palo largo con un potente disparo raso a Rubén, que poco pudo hacer. 2-0 en el minuto 72.
Todo le salía al Real Madrid. Zinedine Zidane había dado con la tecla para tener motivados a sus jugadores, concentrados en ser los más regulares para ir a por LaLiga Santander. Sólo había algo que no podía controlar, las lesiones, las cuáles abundaban en la plantilla y que tenían en vilo a la afición cuando un jugador iba al suelo, como pasó con Alphonse Areola o Fede Valverde.
El Real Madrid sacó otros tres puntos en LaLiga Santander, y sigue siendo líder de la competición, en la cuál sigue invicto. Una muestra más del gran trabajo de Zinedine Zidane en el banquillo, dando importancia a la segunda línea del equipo y preparando el más que importante derbi del sábado ante un Atlético de Madrid que, en estos momentos, es su principal perseguidor.