Cuarta victoria consecutiva del Girona en Montilivi, esta vez contra el Deportivo de la Coruña, que sigue en su caída libre, suma ya 8 jornadas sin ganar.
El Girona, en mitad de tabla, recibía al Depor sumido en una mala racha. El equipo local no estaba cumpliendo las expectativas de inicio de temporada, sí como local, con tres victorias consecutivas en su feudo. Mientras que los coruñeses, no tenían ninguna victoria como visitante en su haber.
Esta dinámica fue también la que se impuso en la primera parte, el Girona, desde el inicio se impuso con holgura a su rival, sumando 12 tiros en la primera parte por ninguno de los coruñeses. Los de Unzué conscientes de los puntos débiles del rival, volcaron su juego por las bandas con centros laterales, ya que los blanquiazules en ese aspecto, esta temporada, es la vía por donde más goles de los rivales llegan.
El cuadro herculino sumido en una racha negativa desde hace bastantes jornada, mostró ese estado de ansiedad y nerviosismo con mucha imprecisión en las acciones . En una de ellos llegó el primer gol del Girona, Lampropoulos envió un balón a Nolaskoain cuando este estaba de espaldas y en mala posición y perdió el balón en favor de Gumbau, que rápidamente armó un contraataque conducido por Borja García.
El centrocampista asistió a Stuani que chutó al poste, el rechace lo recogió el propio Borja García que batió por bajo a Dani Giménez desde dentro del área en el minuto 23. Tras el gol, el partido siguió de la misma manera, un Girona imponente, con mucho juego por banda y un Dépor tratándose de defender. En el minuto 37 Granell botó una falta lateral que, tras un rebote entre Nolaskoain y Bergantiños, Marc Gual aprovechó para marcar el segundo gol. El delantero del equipo catalán, marcó el gol a placer ya que no gozaba de la marca de ningún defensa rival. Los minutos finales del primer acto siguieron siendo un asedio de los gerundenses, pudiendo marcar el tercero en un remate de volea de Aday a centro de Granell que detuvo Dani Giménez.
Tras la reanudación la dinámica del partido empezó a cambiar paulatinamente. El conjunto dirigido por Anquela, situado penúltimo y con 2-0 en el marcador, trató de reaccionar y de darle la vuelta a esa situación complicada y comenzó a hilvanar jugadas y a llegar al área rival. En una de esas jugadas ofensivas del Deportivo, Borja Valle que había entrado poco antes, marcó el 2-1, en una acción individual extraordinaria, regateando a varios jugadores rivales en una diagonal que finalizó en un golpeo desde fuera del área.
Los coruñeses fruto del gol siguieron dominando el juego para conseguir al menos un empate en su visita a un recién descendido como el Girona. Las opciones de empate pasaron por las botas de Aketxe. El mediapunta vasco hizo gala de su magnífico golpeo en una falta escorada y lejana. En principio lo que parecía un centro, se envenenó y no tocó en nadie y llegó el balón delante de la portería pero el guardameta Juan Carlos realizó una fenomenal parada y la envió a córner. El empate parecía posible pero una vez más, un error individual en la zaga herculina, volvió a condenar al Deportivo y encajó el 3-1 obra de Stuani. Lampropoulos condujo en exceso el balón en el inicio de la jugada y Samu Sáiz se lo robó y armó un contragolpe que finalizó asistiendo a Stuani que disparó raso no dejando opción a Dani Giménez.
Poco más pasaría en el encuentro, los blanquiazules acabaron el partido en campo contrario intentando acercarse en el marcador sin éxito. El Girona escala posiciones y se sitúa séptimo con 13 puntos mientras que el Deportivo se coloca penúltimo con 7 puntos. El domingo ambos equipos disputáramos su próxima jornada, el Girona visita El Sardinero mientras que el Dépor recibe al Almería. Tras este resultado y la situación que vive el equipo coruñés el puesto de entrenador de Anquela parece estar muy en entredicho por lo que en las próximas horas o días pueden ocurrir novedades importantes.