El último regalo de Reyes
El Athletic se gusta derrotando al Alavés y ofrece a su hinchada un último regalo de Reyes para cerrar las fechas navideñas. Se viene el 1x1 del partido
Con un día de retraso, los Reyes Magos dejaron una alegría a todos los athleticzales para completar un periodo navideño que puede ser la lanzadera que tanto ha necesitado el equipo. Y, ya que estamos en fechas tan señaladas, toca un 1×1 especial «Reyes Magos». ¿Habéis sido buenos?
Herrerín (6) El paje real: A falta de un Rey Mago dispuesto para la causa, él asume la responsabilidad de recibir todo tipo de misivas y evitar sobretodo que no pase ni una. Tras un partido más tranquilo de lo esperado, lleva 4 partidos imbatido y empieza a disfrutar con la idea de quedarse con la corona.
De Marcos (6) Las pilas que siempre faltan en los juguetes: Empieza y no para hasta estar fundido. Lástima de la lesión al final del partido, tras un encuentro sin mayores sufrimientos defensivos y que le han permitido alegrías ofensivas.
Etxeita (7) El amigo invisible: Seguro que era el último de quien esperabais un regalo que os gustase. Gol y buena actuación en general para un jugador que necesita de sensaciones positivas.
Laporte (7) La corbata para papá: Siempre resulta un obsequio elegante y distinguido que resulta indispensable en las grandes ocasiones. Sin mayor problema durante el partido de hoy y evitando posibles errores no forzados.
Saborit (6) El regalo «chino»: Cuando se espera un producto de marca y te llega el de marca blanca en el mejor de los casos. Nunca lucirá en exceso, pero sigue cumpliendo, más allá de que no le exiges lo mismo que a un «First class». Partido más que correcto ante un rival muy inofensivo.
Mikel Rico (7) El pack de calcetines de la mercería del pueblo: Jamás de los jamases lo pedirías para Reyes y cuando te lo dan, no le ves la gracia. Pero que prácticos son los jodidos. Ha vuelto a sostener el centro del campo y su rendimiento actual ha revitalizado la medular del Athletic.
Iturraspe (8) El auto-regalo: Es misión cuasi imposible pedirlo a otro sin que acabe en fracaso. Ander ya transmite mejores sensaciones y se ha regalado un partido muy bueno moviendo al equipo a su antojo. Sólo él es capaz de comprenderse a sí mismo.
Susaeta (8) El vale-regalo: Cuando no sabes que regalar y, por vaguedad o por miedo a meter la pata, directamente le pasas la responsabilidad al que va a recibir el obsequio. A Susaeta le han dado el balón como si fuera un vale, y bien que ha hecho con él lo que le ha venido en gana. Gran partido de Markel.
Raúl García (6) Colonia Varón Dandy: No puede gustar a todos, pero a quienes le gusta, les apasiona. Siempre cumplidor, responsable del penalti a favor y fajándose como siempre. Lo de la elegancia, para otros.
Williams (8) El Scalextric: Regalo eternamente pedido por todos y cada uno de los niños de la galaxia y del que los Reyes raras veces se acuerdan. Pero cuando llega, es eléctrico y emocionante a partes iguales. Ágil, veloz y con una mejoría clara en cuanto al criterio a la hora de escoger entre las distintas opciones, Williams ha sido la pesadilla babazorra. Que dure.
Aduriz (7) El roscón de Reyes: Da igual por donde lo cortes o las partes que haga, que Aduriz siempre encontrará el Rey. Un incordio para la defensa alavesa y otro gol más para agrandar su legado. El único roscón que no se atraganta.
Beñat (6) Los caramelos de la cabalgata: Llegas con toda la comitiva lanzada y todos los regalos preparados, pero siempre te queda el consuelo de disfrutar de un caramelo inesperado. Beñat ha aportado un punto de criterio en los escasos minutos que ha disputado, costándole entrar en partido.
Lekue (-) Papel de regalo: No aporta nada al obsequio en si. Entró por la lesión de De Marcos con el partido finiquitado y no participó apenas del juego.
Sabin Merino (-) Una carta de Reyes Magos sin enviar: Papel mojado y una pérdida de tiempo. Es lo que se buscaba con el cambio y Sabin fue el elegido para, para… bueno, fue el escogido.
Ziganda (5) Carbón (dulce): Tras llegar con el gancho a estas alturas, los Reyes Magos han cumplido y la victoria apacigua el ruido sobre su figura. Le faltó vista para tener la fiesta completa al no darle ni un minuto a un Yeray al que todo el estadio deseaba volver a ver vestido de corto. Nos quedamos sin guinda para el pastel.
Por @GomilaLopez