Un Tudelano gris y afortunado se impone al Leioa

Mañana nublada y fría en el Ciudad de Tudela en la que el CD Tudelano recibía a la SD Leioa en un duelo de necesidad para ambos equipos, debido a la situación en la que ambos conjuntos se encontraban en la tabla. Blanquinegros y verdes se medían en un choque que se desarrolló según lo previsto; poco fútbol, mucha dureza y alta tensión.

Rodaba el balón sobre el verde y eran los tudelanos los que mandaban durante los primeros compases de juego. Lo intentaba Ángel López en el minuto 2 de partido con un disparo lejano que se marchaba a la izquierda del marco defendido por Atangana. Poco iba a durar el arreón inicial de los locales puesto que desde el minuto 8, cuando Mikel Juaristi obligaba a Pagola a estirarse en una ocasión a balón parado, los visitantes iban a tomar las riendas del juego.

Estos iban a ser los mejores minutos del Leioa en todo el encuentro, unos minutos de posesión en campo contrario con llegadas por banda y pases hilados por dentro, que hacían sufrir a los tudelanos. Precisamente en esta fase del juego en la que el dominio era claramente de los visitantes llegó el premio, cuando tras una gran jugada ensayada a la salida de un córner, Christian Guijarro ponía el 0-1 inicial ante la pasividad defensiva de un Tudelano que estaba ausente.

El gol visitante actuó de despertador de los blanquinegros y fue cuando estos comenzaron a tener mayor presencia en ataque y sobretodo una mayor intensidad defensiva. Los locales buscaban la portería rival y se atascaban en los últimos metros, como suele ser costumbre en los de la capital ribera durante estas últimas jornadas.

Iba a ser en el minuto 25 cuando, tras un balón largo de Pagola, Edson Torres tras una gran carrera se deshacía de su par y batía por bajo a Atangana. El mejicano, que firmó hoy un auténtico partidazo, ponía el empate en el luminoso, rompiendo a llorar en la celebración y daba alas a un Tudelano que se había encontrado completamente perdido sobre el verde.

Desde ese momento hasta el final de la primera mitad se produjeron fases de dominio alterno, en la que ningún conjunto se hacía dueño del balón. Sólo fue destacable un intento de Edson Torres en un disparo de falta desde la frontal y la desgraciada lesión de Meseguer en el minuto 45, cuando en la pugna por un balón aéreo se lesionaba su rodilla derecha; una lesión que a falta del parte médico, no tiene buena pinta.

La segunda parte comenzaba con las tablas en el marcador y con la sensación de que ninguno de los dos equipos quería dejar escapar el punto. Las múltiples pérdidas de tiempo y los balones largos sin asumir riesgos fueron la tónica durante el resto del encuentro. Destacó por parte de los locales nuevamente Ángel López, firmando un gran partido, siendo el eje vertebrador de los tudelanos y el jefe de la sala de máquinas blanquinegra.

Poco se vio en esta segunda parte, apenas tímidos acercamientos de los locales y alguna jugada de peligro a balón parado de los visitantes. El fútbol es impredecible y así se vio hoy en Tudela, cuando Lumbreras retiró del campo a Edson Torres para dar entrada a Zamorano y jugar así con una línea de 5 atrás. La decisión fue muy protestada por la hinchada local que empieza a estar harta del conformismo y el miedo que rodea al cuerpo técnico tudelano.

Pues sin comerlo ni beberlo, tras un cambio puramente defensivo, la suerte callo de cara a los locales y fue en el minuto 81 cuando Obieta puso el 2-1 en el electrónico, tras un fuerte disparo lejano que se colaba en la meta de Atangana, el cual pudo hacer mucho más. Los locales tomaron ventaja en el marcador y resistieron el empuje de los de Vizcaya durante los minutos finales de juego.

Con este resultado el Tudelano suma 3 puntos vitales para salir del ahogo de los puestos bajos de la tabla y el Leioa, pese a luchar e intentarlo, se va de vacío y en una situación muy comprometida en la tabla clasificatoria.