Un efectivo Getafe volvió a destruir el fortín de Ipurua, dejando a los de Mendilibar al borde del abismo en un partido duro y muy intenso desde el primer minuto en el que el VAR llegó a anular hasta tres goles.
Nada de ello fue suficiente para que los de Mendilibar doblegaran a un Getafe que encontró en el exarmero Ángel su tabla de salvación en la segunda mitad, y sumó otros tres puntos muy importantes antes de su importante partido europeo de esta próxima semana.
El Getafe arrancó muy fuerte el partido, aprovechando tal vez la ansiedad de los locales, con una llegada al área nada más arrancar el partido y reclamando una posible mano en el área armera.
El Eibar quería encontrar su sitio con la presión adelantada asfixiando al Getafe, pero los de Bordalás tenían claro a lo que tenían que jugar en el primer cuarto de hora de partido.
En cualquier caso, el Eibar no dominaba como en él es habitual en Ipurua, y se sentía incómodo, tal vez también por los inéditos laterales esta temporada, Bigas y Correa, situación que el Getafe trataba de aprovechar cada vez que pasaba del centro del campo.
La lucha en el centro del campo era titánica, de mucha fuerza y de igual a igual, tanto era así que Diop vio la primera cartulina del partido en el minuto 16, mala noticia para los de Mendilibar en vista de dónde se estaba desarrollando gran parte del juego.
Pese a todo, el EIbar tuvo poco después una bonita ocasión doble, primero con un remate de Charles a pase de Kike García, y al revés en la continuación de la jugada.
Hugo Duro dio la réplica con un remate de cabeza poco después, dejando patente que el partido estaba totalmente abierto y vivo para ambos equipos.
El encuentro entró en unos minutos algo tediosos, con mucha lucha, eso sí, tal vez demasiada, porque las interrupciones eran constantes y se jugaba poco cerca de las áreas.
En cualquier caso, en los últimos minutos de la primera parte, era más el Getafe el que jugaba en campo contrario, y el EIbar parecía buscar el descanso para poder reaccionar, sabedor de que necesitaba la victoria.
Además, el Eibar perdía para el derbi de San Mamés a sus dos jugadores apercibidos, Diop y Orellana, lo que hacía aún más obligatorio ganar el choque frente a los madrileños.
El Getafe tuvo el gol en el último segundo, con un gran remate de Olivera que terminó por estrellarse en el larguero de la portería de Dmitrovic.
El público y el equipo armero no terminaron demasiado contentos con la actuación de Prieto Iglesias, pero aún restaba toda la segunda mitad para romper la igualada inicial.
En la reanudación, la lluvia se hizo fuerte para otorgar aún más épica a un partido duro y muy físico por parte de ambos equipos.
El Eibar salió algo más activo tras el descanso, y en los primeros minutos se acercó al área del Getafe, aunque sin acierto ni suerte, y con los delanteros sin poder encontrarse con el gol.
Mata marcó, sin embargo, en el minuto 51, pero tras consultar al VAR, Prieto Iglesias anuló el gol por un fuera de juego muy justo, situación que Ipurua celebró consciente de lo que hubiera supuesto ir por detrás en el marcador.
Y lo que es el fútbol, en la siguiente jugada, el Eibar se adelantaba con un gol de Kike García a pase de Corrrea, lo que cambiaba totalmente el panorama en un Ipurua.
Pero el VAR anuló también el gol por una mano previa de Kike García. Tres posibles resultados en un minuto que dejaron las cosas como estaban, con la igualada en el marcador.
El choque entró en una dinámica más atractiva para el espectador y Ángel, recién salido del banquillo, marcó un auténtico golazo superando a Dmitrovic de forma magistral en el mano a mano.
Todo le salía mal al EIbar, tanto que Enrich vio tarjeta amarilla segundos después de entrar al campo, fruto de la frustración de un equipo que se veía en serios problemas clasificatorios si se confirmaba una nueva derrota en Ipurua.
El VAR volvió a intervenir en otro gol anulado al Getafe por fuera de juego de Ángel, previo a un gol en propia puerta de Bigas, que hubiera supuesto la puntilla definitiva a un Eibar que aún tenía el descuento para lograr el empate.
Eso sí, con tantas interrupciones, el descuento fue de 8 minutos, y Arbilla tuvo una buena falta en la frontal que se la marchó arriba.
Pero nada podía hacer al Eibar marcar un gol, y el choque acabó con una victoria visitante que da alas a los de Bordalás y deja a Mendilibar y a su equipo sobre el alambre antes del derbi en San Mamés.
