Athletic Club 2019, con Garitano el león rugió de nuevo

Con el fin de año a la vuelta de la esquina, toca hacer balance de cómo le ha ido el 2019 al Athletic Club de Bilbao. Son varios los nombres propios que han destacado en los últimos doce meses en la órbita rojiblanca. Aitor Elizegui llegó a la presidencia de los de Ibaigane tras imponerse en uno de los comicios más reñidos en la historia del Club. Tras siete años y medio al frente de la entidad Josu Urrutia dejó el cargo en manos del cocinero bilbaíno.

Unai Simón a base de buenas actuaciones se ha asentado en la siempre difícil portería de San Mamés, mostrándose como una de las revelaciones del año. Iñaki Williams también debe de ser mencionado. El nueve del Athletic lo ha jugado todo batiendo records de continuidad jornada tras jornada. Raúl García e Iñigo Martínez han sido piedras angulares sobre las que se ha apoyado el proyecto, tirando de galones y mostrando su capacidad y jerarquía. Pero si hay un nombre que destaca por encima de los anteriormente citados es el de Gaizka Garitano Agirre. Su llegada al equipo en un momento delicado fue providencial. Cambió el rumbo de los leones y su desempeño al frente del equipo podemos catalogarlo de notable alto.

La remontada se fraguó a fuego lento

Gaizka Garitano asumió las riendas de un equipo situado en puestos de descenso mediado el mes de Diciembre. Su impronta se notó desde nada más dar el salto desde el filial. Enlazando ocho envites ligueros consecutivos sin conocer la derrota.

El año comenzó con un triunfo en Balaidos. El primero del curso a domicilio. A renglón seguido llegó la eliminación en Copa del Rey a manos del Sevilla. Pero esa Copa al Athletic aunque suene duro decirlo le sobraba. Los leones debían de centrarse en la competición doméstica y semana a semana así lo hicieron con el objetivo de salir del atolladero clasificatorio en el que se habían metido.

Los resultados fueron llegando para alivio de la parroquia rojiblanca. Victorias de mérito ante Sevilla, Betis, Eibar y Huesca y un par de empates ante Villarreal y Barcelona para escalar puestos en la tabla y dejar atrás los fantasmas del descenso.

Entre medio quizá el único borrón de los primeros partidos de Garitano al frente del equipo. La derrota en Anoeta frente a la Real Sociedad. Ese día el equipo no estuvo, pero por suerte quedó en anécdota porque la progresión del equipo era evidente y su escalada clasificatoria  también.

La mayoría de los encuentros presentaban un denominador común. Solidez defensiva dejando varios días la portería a cero, trabajo a raudales e ideas claras.

Europa en el horizonte

Tras lograr tres victorias consecutivas en Marzo, frente al Atlético, Girona y Levante, en el Botxo se hablaba de la posibilidad de pelear por los puestos europeos.

Algo impensable tan  solo tres meses antes. Con el objetivo de la salvación ya en el zurrón el Athletic peleó por ello hasta la última jornada. La Europa League era una posibilidad y alternaron la séptima y octava posición durante los dos últimos meses de competición.

Cuando mejor lo tenían tras vencer en Butarque al Leganés, llegaron dos resultados negativos que encarecieron el premio. Empate inexplicable en casa ante el Alavés y derrota en Valladolid.

En el último partido del curso en San Mamés lograron vencer al Celta y viajaron con opciones reales y matemáticas de clasificar para Europa a enfrentarse a un Sevilla que se jugaba la Champions. Pero como en el cuento de la lechera, el jarrón se acabó rompiendo y los aficionados rojiblancos se quedaron con la miel en los labios.

A pesar del desenlace final, no cabe duda de que Garitano le cambió la cara a un equipo que realizó un gran esfuerzo durante la segunda vuelta y llegó muy justito al tramo final del campeonato. Finalmente acabaron octavos con 53 puntos los mismo que sumó el Espanyol que le arrebató la ansiada séptima plaza por el goal average particular.

Dos ilustres salidas y pocos movimientos en el mercado de fichajes

Con el final de la competición, los jugadores se fueron a disfrutar de unas merecidas vacaciones. Dos de ellos con la pena de saber que no volverían a vestir la zamarra rojiblanca. Ley de vida.

Markel Susaeta abandonó el Athletic tras toda una vida defendiendo sus colores. 507 partidos como león, 379 de ellos en liga merecían una salida de otro color y tipo a como la tuvo el centrocampista de Eibar.

Ander Iturraspe otro clásico que había perdido protagonismo las últimas temporadas, también tuvo que hacer las maletas. El de Abadiño a pesar de los 328 partidos con el Athletic y al igual que Susaeta otro puñado de ellos en la cantera se vio obligado a cambiar de colores.

En el apartado de llegadas destacar la incorporación desde el filial de tres katxorros. Villalibre, Larrazabal y Sancet. Futbolistas llamados a rejuvenecer la plantilla sobradamente conocidos por el míster. Junto a ellos  retornó  Mikel Vesga tras jugar cedido en el Leganés.

Buen inicio de competición

Los rojiblancos iniciaron la presente temporada venciendo a todo un FC Barcelona. Se mantuvieron durante las seis primeras jornadas invictos y llegaron a disfrutar de un liderato a la conclusión de la quinta fecha que no se daba a estas alturas desde hacia 26 años.

El 1-4-2-3-1 sin florituras y cargado de pragmatismo daba sus réditos a los de Garitano. Desde los primeros compases de la competición Unai Simón acaparaba titulares con sus actuaciones dejando en varios encuentros su meta inmaculada.

Tras esa buena racha llegaron cuatro partidos sin conocer la victoria que desinflaron un poco el globo rojiblanco. Pero a renglón seguido otros cinco encuentros sumando colocaron a los de Garitano en los puestos nobles de la clasificación.

Victorias ante el Espanyol, Levante y Granada en San Mames y un triunfo para desbaratar la increible trayectoria de Osasuna en su feudo que posibilitaron meterse de lleno en la pugna por los puestos europeos.

Tras la sonrojante derrota sufrida en el Villamarin, se dieron otros dos empates sin goles. Dos igualadas totalmente distintas. Ante el Eibar fue un derbi gris y atascado. Frente al Real Madrid en el Bernabeu se sumó un punto muy trabajado y celebrado para cerrar el año en la séptima posición con 28 unidades a cuatro de Champions League.

Entre medio disputaron la primera ronda de Copa del Rey deshaciéndose del Intercity sin grandes alardes. En un partido donde hicieron valer la diferencia de categoría.

Los números del Athletic en 2019

El conjunto rojiblanco ha disputado 39 partidos de LaLigaSantander y 3 de Copa del Rey. En liga han logrado 19 victorias, 11 empates y sufrido 10 derrotas. En Copa dos victorias y una derrota. Centrándonos en la liga, en este año natural los de Garitano han sumado 65 puntos. Marcando 44 goles y encajando 33.

En el apartado individual Iñaki Williams ha sido el futbolista que más partidos ha disputado en liga con los leones, todos 39, más 2 de Copa. Actualmente lleva la friolera de 137 partidos consecutivos en Liga y ante Osasuna superó a Carmelo Cedrun como el zurigorri con más partidos consecutivos en la historia del Athletic. Por detrás del delantero pamplonés aparecen Raul García y Dani García empatados a 34.

En cuanto a los goles tenemos un empate entre Williams y Raúl García ambos han marcado 13 bakalaos, por detrás aparece Iker Muniain con 7. En cuanto a las asitencias Iñigo Córdoba con 6 lidera la clasificación.

Balance positivo del 2019

En definitiva  en este 2019 el Athletic ha vuelto a su ser. Tras un primer semestre en constante progresión donde poco a poco se fueron olvidando de los miedos del descenso el equipo regaló buenas actuaciones que lamentablemente no llegaron para volver a Europa.

Pero no cabe duda de que cualquier aficionado rojiblanco lo hubiese firmado viendo cómo se inició la competición y como estaba el equipo hace prácticamente un año.

En la presente temporada tras un gran inicio, se disfrutó del liderato y se vuelve a aspirar a viajar por Europa. El estilo de juego está más que consolidado e incluso comenzamos a observar variantes como la de jugar con tres centrales. La Copa este 2020 también puede ser una competicion atractiva y deseada para los zurigorris.

La savia nueva empieza a asomar la cabeza comandados por Oihan Sancet, la nueva perla de Lezama. Diamante en bruto que está llamado a comandar y ser el buque insignia del Athletic del futuro. Por detras llegan buenas camadas y el futuro esta asegurado

Y todo ello a las órdenes de Gaizka Garitano el artífice del cambio de rumbo que dio el equipo. El míster siente el respaldo de Alkorta y Elizegui y ha sido capaz de revalorizar a la  plantilla y al equipo. Haciendo rugir de nuevo al León y erigiéndose en el principal protagonista de este 2019 en el Athletic Club.

Imagenes: athletic-club.eus