El Córdoba asalta Los Cármenes
Javi Flores y Miguel de las Cuevas consiguieron superar a un filial que por momentos puso contra las cuerdas al Córdoba CF.
Un partido importante para el filial nazarí y el Córdoba CF se iba a celebrar en el Nuevo Los Cármenes. El conjunto de David Tenorio quería salir de su mala racha, la cual acusa desde hace dos meses, mientras que los blanquiverdes querían continuar con las buenas sensaciones. Ambos equipos tenían en concreto un mismo objetivo: la primera victoria del 2020.
Una guerra de trincheras
Los dos equipos salían con ganas de abrir el marcador lo antes posible. El juego vertical de ambas escuadras iniciaba un encuentro que tenía los tintes de ser intenso desde un inicio hasta el final. Los jugadores del filial nazarí parecía que eran los que se acercaban más a la portería de Becerra, lo que alejaría el peligro de una portería que lleva mucho castigo esta temporada.
Poco a poco los discípulos de Agné empezarían a hacer con el esférico. El juego de los califas pasa por controlar el esférico e imponer los tiempos de juego pero, a pesar de ello, estaban teniendo problemas para doblegar a un Recreativo Granada que salía con mucha facilidad a la contra. Por suerte para los visitantes, los jugadores de Tenorio no estaban siendo muy precisos en los últimos metros.
El partido se había estancado con una guerra en el centro del campo, donde cada carrera que intentaba algún equipo era frenada por las defensas rivales. Se acercaba el final de la primera mitad y todo parecía que el marcador no se movería del inicial. El pase por vestuarios se hacía necesario y habría que ver si los técnicos conseguían que sus jugadores reaccionaran.
El paso por vestuarios sienta bien al Córdoba
La reanudación traería ya el primer cambio de los cordobesistas. Agné quería que su equipo tuviera más presencia en el centro del campo, por lo que daría entrada a Chus Herrero para liberar más de funciones defensivas a Imanol. A pesar de ello, los primeros minutos no parecieron muy distintos a lo que se había visto hasta el momento.
El filial nazarí aún así seguiría creando peligro cada vez que llegaba al área cordobesista. El problema para Tenorio sería que su delantero Nuha no estaba teniendo acierto en los últimos metros, algo que para suerte de los cordobesistas seguía manteniendo el marcador a cero. Aún así, el filial nazarí estaba avisando y tantos avisos nunca son buenos para un equipo que no consigue cerrar filas atrás.
Pero no iba a ser el Recreativo Granada quien marcaría. El Córdoba empezaba a acomodarse y el ataque blanquiverde se echaría arriba con todo lo que tenía aprovechando su primer cambio. Un buen centro de Fernández en el centro del área permitiría a Javi Flores rematar de cabeza sin ninguna oposición, poniendo el primer tanto en el marcador.
Un asedio que no surte efecto
Becerra tendría que rescatar a los suyos minutos después del gol de los suyos. Parecía que se había relajado el equipo de Agné y el guardameta tendría que parar por dos veces consecutivas los tiros de Rubén. Empezaban aquí unos minutos donde el Córdoba sufriría un pequeño asedio, concediendo mucho terreno a su rival y sin frenar a los nazaríes muy lejos de su área, dando muchos saques de esquina a los locales.
A pesar de ello, los cordobesistas empezarían a ensanchar el campo y alejar a los pupilos de Tenorio de su área. Era inevitable que el Recreativo Granada diese un paso al frente, sobre todo viendo los cambios ofensivos en los últimos minutos, pero por ahora el Córdoba estaba consiguiendo mantener lejos las ocasiones peligrosas de su portería.
Los minutos finales irían a poco a poco por los contínuos parones que hacían los jugadores blanquiverdes, que estaban sabiendo cómo jugar estos últimos minutos. Lo que no esperaban los locales era el zarpazo que recibirían antes del 90, cuando Miguel de las Cuevas marcaría un buen gol desde la frontal, sentenciando un encuentro que por momentos pudo merecer más el filial nazarí pero en el que se impuso la veteranía blanquiverde.
