La fe y tesón del Fuenlabrada queda sin premio

El Alcorcón se llevó el llamado derbi de los ocho kilómetros que tuvo de todo. Tuvo goles, siete, polémica, mucha, expulsiones, dos y que denotó que ambos querían ganar. Fue el Alcorcón, cuando estaba con dos jugadores más y en el último suspiro, que se llevó un derbi que debió ganar mucho antes, pero que no fue capaz de asegurar cuando vencía por dos goles de ventaja y estaba en superioridad. Ahí el Fuenlabrada tiró de arrestos, fe, brega y ganas para poder levantar dos goles de desventaja. Pero el fútbol hoy se puede decir que fue cruel con ellos, porque cuando saboreaban ese punto, Arribas se lo arrebató en el último suspiro.

Comenzó el Fuenlabrada mandando más en los minutos iniciales de un partido que comenzó con aproximadamente un cuarto de hora de retraso por un fallo eléctrico en el Fernando Torres. José Rodríguez y Oriol Riera con dos remates desviados tuvieron las primeras ocasiones. El Alcorcón llevó mucho peligro a balón parado como demostraría en varios goles. Álex Mula avisó en una acción de estrategia que remató fuera. Fue el preludio del 0-1 que lograría Luis Perea tras rematar de cabeza un córner botado por Álex Mula.

Lejos de reaccionar el cuadro azul, un grave error doblaría la ventaja alfarera. David Prieto falla en una cesión a su guardameta y Stoichkov no perdona en el mano a mano al anticiparse a Biel Ribas. Parecía que el encuentro se le ponía muy cuesta arriba al Fuenlabrada, pero también a balón parado, Juanma aparecería en un saque de esquina para poner el 1-2 a pocos minutos del descanso. Así parecía finalizaría el primer tiempo, pero de nuevo Luis Perea volvería a hacer diana en un balón parado. Ahora en una falta lateral botada también por Álex Mula, el canterano de Osasuna puso el 1-3 con el que se llegó al intermedio.

Ya en el segundo tiempo el Fuenlabrada se vio obligado a arriesgar. El Alcorcón buscaba las contras, muy replegado y el Fuenlabrada se iba con su habitual juego directo a por el partido. Juanma logró anotar, pero el VAR anuló el gol tres minutos antes de que viese la segunda amarilla y dejase a su equipo con diez. Parecía que esto dejaba el encuentro muy encarrilado para los alfareros. Y era lógico pensarlo, pues tenía dos goles de ventaja y un hombre más.

Pero nada más lejos de la realidad. A los cuatro minutos de quedarse en inferioridad, Iban Salvador remata un balón al área batiendo a Dani Jiménez. El Fernando Torres creía y el equipo fuenlabreño lo hizo posible ante un Alcorcón que había entrado en pánico. Luis Perea cometió penalti sobre Caye Quintana y Hugo Fraile no perdonó para poner el 3-3. Ahí en Fuenlabrada bajó las revoluciones, aunque no renunció al 4-3 e incluso Caye Quintana tuvo una clara ocasión, él fue la condena de su equipo.

Una innecesaria como clara falta le costó la roja directa a poco más de cinco minutos para el final. Con dos hombres más el Alcorcón se serenó ante los de Mere Hermoso que buscaban conservar ese botín que era un punto. Casi lo hacen, porque el cuadro alfarero no mostraba ideas, pero apareció Glauder para cometer un error que en un defensa del Fuenlabrada hubiese sido impensable hace semanas. No acertó a despejar el último balón del partido y permitió a Óscar Arribas batir a Biel Ribas en su salida y poner el 3-4 con el que acababa el partido.

Las caras en los jugadores y aficionados del Fuenlabrada lo decían todo, mientras que el Alcorcón se llevaba un derbi que tuvo ganado mucho antes, pero que estuvo a punto de tirar por la borda gracias a que en el Fernando Torres está prohibido rendirse.