David Gallego asume la dirección del Sporting
El técnico catalán de 48 años firma por una temporada, con posibilidad de extender un año más por objetivos
David Gallego Rodríguez (Súria, Barcelona, 26 de enero de 1972) ya es nuevo entrenador del Real Sporting de Gijón. El catalán, de 48 años, firma por una campaña como entrenador rojiblanco, aunque con la posibilidad por objetivos de ampliar un año más. Es la apuesta de Javi Rico, director deportivo del equipo gijonés, para iniciar su primer proyecto. Cumple el perfil buscado de un técnico joven, con hambre y que apueste decididamente por la cantera.
Desde que se decidió el relevo de Miroslav Djukic hace unas semanas, el club empezó a trabajar el relevo buscando un técnico de ese perfil. La lista de posibles candidatos fue muy corta, con nombres como el suyo -que nunca trascendió hasta estar el acuerdo cerrado-, Andoni Iraola, Fran Fernández o Rubén de la Barrera. Pero el de Súria fue el elegido en primera instancia.
Su estilo ofensivo, vertical y de dotar a sus equipos de una gran intensidad es lo que ha convencido al cuadro sportinguista para apostar por él. Llega a Gijón con su cuerpo técnico de confianza, Toni Clavero será el segundo entrenador y Eduardo Domínguez como preparador físico. El primero es acompañante habitual de Gallego en su etapa en el Espanyol y el segundo cuenta con una dilatada trayectoria en el fútbol español y en el extranjero
Precisamente en el club perico es donde David Gallego tiene toda su experiencia. Entró en el club blanquiazul en 2013 para dirigir al juvenil. Con él que logró varios títulos, imponiéndose siempre a su eterno rival, el FC Barcelona. Dio el paso en 2016 al filial, donde a pesar de un descenso a Tercera, siguió dejándolo listo para un play-off de ascenso que él no dirigió al asumir de forma interina la dirección del equipo durante cinco jornadas. En ellas logró cuatro victorias y un empate.
Después volvió al filial, donde lo dejó a las puertas del play-off de ascenso a Segunda y esta campaña fue el elegido para iniciar la temporada en el primer equipo perico. Una planificación defectuosa y un pésimo arranque le costaron el puesto tras solo ocho jornadas en las que no sumó más que cinco puntos. Ahora llega a Gijón en una nueva etapa donde dirigirá a un equipo con un presupuesto muy austero y en el que habrá presencia de mucho canterano del club gijonés.
