Leganés y Valladolid, eternos enemigos
Lo que empezó con el 'caso Cuéllar' hace algo más de un año ahora implica otros tres nombres en una situación totalmente enquistada
Las relaciones entre Real Valladolid y CD Leganés no pueden estar más rotas. Lo que empezó con el ‘caso Cuéllar’ por el que el club blanquivioleta intentó fichar al guardameta extremeño no es algo que en Butarque hayan aún olvidado. Esa tensión quedó latente durante la temporada, pero ahora todo vuelto a explotar por los aires.
Comenzó semanas atrás con el intento del Real Valladolid de fichar a José Arnáiz. El cuadro pucelano afirma haber presentado hasta seis ofertas por su traspaso, pero el Leganés ha rechazado todas. A pesar de que el talaverano ve con muy buenos ojos volver al club donde dio el salto al fútbol profesional la negativa del Leganés, quien lo tiene bajo contrato hasta 2023, lo impide.
El cuadro blanquivioleta respondió tiempo después negando la carta de libertad a Antoñito Regal al descubrir que el cuadro pepinero estaba tras su fichaje. En Pucela no cuentan con el lateral, que apuntaba a irse al CD Tenerife -donde ya le dan por perdido-, pero tras descubrir que su destino apuntaba a ser Butarque, endurecieron las condiciones del acuerdo para quedar libre.
El ‘caso Miguel’, último choque frontal
Y ahora se suma el último capítulo de la historia: Miguel de la Fuente. El canterano blanquivioleta se ha negado en los últimos meses a firmar una renovación que parecía hecha y que le convertiría en jugador del primer equipo. Todo por la intromisión de sus agentes de Bahía que le dijeron no renovase, ya que en su contrato existe una cláusula que si un equipo de categoría superior al Promesas iguala su ficha en su actual contrato -de coste muy bajo, dado que tiene ficha del filial- puede salir cedido con el único coste de asumir su salario.
Eso es lo que quiere hacer el Leganés que ya tiene el acuerdo cerrado con el jugador de Tudela del Duero. Pero el Real Valladolid niega la posibilidad de una salida así y el asunto apunta a acabar judicializado. Ya que el pacto entre clubes se antoja imposible, es probable que LaLiga intente intermediar. Pero en el Real Valladolid no van a aceptar que el jugador sea miembro del Leganés la próxima temporada. De hecho su director deportivo, Miguel Ángel Gómez, ya ha dicho que acudirán a las instancias judiciales que sean necesarias.
Si el asunto llega a la justicia ordinaria el mayor perjudicado sería al jugador que se arriesga a quedarse toda la temporada en la grada sin disputar minuto alguno. Pero la realidad a día de hoy, indica que difícilmente habrá otro camino con el enfrentamiento abierto entre todas las partes.
