Eibar 0-0 Celta: Miedo a un mal inicio en Ipurúa
Eibar y Celta empataron sin goles en un encuentro que ninguno mereció ganar
Eibar y Celta se repartieron los primeros puntos de la temporada tras empatar sin goles en el estadio de Ipurúa. Ninguno de los dos conjuntos supo encontrar la clave del encuentro, y los primeros goles y la primera victoria de la campaña 2020-2021 aún deberá esperar.
El Eibar salió al encuentro más contundente, y pronto encontró la primera oportunidad del partido. A los tres minutos, Kike García robó un balón cerca del área celeste y colocó el balón en el punto de penalti. Por allí apareció Sergi Enrich para dejarle el cuero con el pecho a Pedro León, que mandó al limbo la ocasión con un disparo muy desviado. El primer cuarto de hora fue dominado por los de Mendilibar, ante un Celta que no encontraba su sitio en el campo. El tridente ofensivo de los visitantes, formado por Aspas, Nolito y Emre Mor, aguardaba para salir rápido a la contra ante la adelantada defensa armera. En una de las primeras ocasiones en las que el conjunto olívico salió con peligro, Olaza puso un centro atrás para el disparo de Nolito, pero Dmitrovic despejó a córner. El cuadro local dominó el primer acto, pero las mejores oportunidades cayeron del lado visitante. Brais Méndez gozó de la opción más peligrosa a la media hora, pero, tras un magnífico control, su vaselina se marchó a la izquierda del portero serbio.
Al comienzo del segundo acto, el Celta añadió el control del balón a las ocasiones. Aidoo la tuvo en el 50′ para adelantar a los gallegos, pero su disparo con la zurda se marchó por poco. El Eibar respondió con un voleón de Bigas que estuvo a punto de convertirse en el gol de la temporada. Las oportunidades caían con cuentagotas, y el 0-0 se encaminaba como resultado final. No lo quería así Emre Mor, que con una jugada de fantasía se zafó de dos zagueros y volvió a poner a prueba a Dmitrovic. El turco, con el que nadie contaba a principio de la pretemporada, fue de lo más destacado por parte de los visitantes. En los últimos compases del encuentro, ninguno de los dos equipos arriesgó en demasía para buscar la victoria. La expulsión de Pape Diop a falta de tres minutos espoleó al Celta en los últimos instantes, pero no fue suficiente. El partido finalizó con reparto de puntos para dos equipos que no quisieron complicarse en su estreno liguero.