El UCAM resiste el empuje blanquiverde

Los dos equipos que mejor iban del grupo 4B se encontrarían en el Nuevo Arcángel para luchar por los tres puntos que les diesen el liderato en solitario. Los jugadores de Salmerón llegaban tras ganar por la mínima los dos primeros duelos de la temporada, algo que sabían que debían cambiar si querían vencer al equipo, a priori, más fuerte del grupo. Por su parte, el Córdoba llegaba con la confianza por las nubes y con la intención de darle una nueva alegría a una grada que solo tendría esta vez 400 aficionados blanquiverdes.

El UCAM impone su ritmo pero sin ocasiones claras

El nivel de control estaría dividido entre ambos conjuntos. A pesar de ello, Javi Flores sería el primero en poner a prueba al guardameta de los universitarios, Biel Ribas, aunque se le marcharía por encima de la portería. No había muchas ocasiones claras, pero los blanquiverdes estaban teniendo paciencia para encontrar a su killer, Piovaccari, quien se encuentra actualmente en un momento dulce.

Los de Salmerón irían mejorando con el paso de los minutos y quien empezaba a tener más trabajo de la cuenta era Djetei. El central cordobesista estaba teniendo que despejar distintos balones importantes que buscaban la espalda de la defensa y durante unos minutos pudo ver cómo el UCAM acumulaba muchos jugadores cerca del área de Edu Frías. Sabas daba órdenes desde la banda para levantar a su equipo y empezar a buscar a su delantero, que estaba muy solo arriba peleándose con los centrales murcianos.

El final de la primera mitad estaría marcado por un UCAM que no concedía un solo metro, dominando por completo con su dibujo sobre el césped. El Córdoba se agarraba a jugadas rápidas y balones largos, algo que le daría una oportunidad de oro para marcharse al descanso por delante de no ser por el palo. Una gran jugada de Piovaccari, con varios defensas tratando de pararle, permitiría que Javi Flores se incorporara solo por su izquierda. De forma generosa, el italiano cedería el esférico para que el capitán blanquiverde tirara a marcar pero el palo evitaría el tanto.

Un quiero y no puedo

El descanso le vendría bien a los cordobesistas ya que saldrían con otros aires a la segunda mitad. Sabas reactivaría a los suyos, que parecía recuperar su nivel ofensivo ya visto en partidos anteriores, y por poco podía haberse adelantado de nuevo. Una falta al borde del área sobre Piovaccari permitiría al capitán del Córdoba poner un gran balón envenenado, el cual sería tocado por Biel Ribas mandándolo al larguero y evitando así una vez más el 1-0.

Los cambios de Sabas iban dirigidos por completo a ganar el encuentro. Todo el potencial ofensivo que tenía en el banquillo iría saltando al terreno de juego y el UCAM parecía, por momentos, cada vez más dominado. Las prisas se iban apoderando de los blanquiverdes y esto podía volverse en su contra en su búsqueda por el gol.

Las ganas del Córdoba no serían suficientes para superar la barrera defensiva de Salmerón y a un Biel Ribas que parecía estar en un inmejorable estado de forma. El reparto de puntos finalmente mantendrá a los andaluces en la primera plaza y al UCAM segundo con los mismos puntos, dejando para la cuarta jornada una nueva oportunidad para que alguno de los dos conjuntos intente hacerse con el liderato en solitario.