El Córdoba prolonga la depresión del Albacete

El Córdoba avanza de ronda en Copa del Rey tras eliminar al Albacete con un gol en propia puerta superada la hora de encuentro. El cuadro manchego trasladó también a la Copa su mala dinámica y racha desde la liga y en el segundo encuentro como entrenador manchego del gijonés Alejandro Menéndez volvió a sumar una segunda derrota y sin lograr ver portería contraria.

En el lado contrario, el blanquiverde todo es al revés. Tres de tres desde la llegada de Pablo Alfaro que le ha cambiado la cara al cuadro cordobesista. Por dinámica, obviando la diferencia de una categoría entre ambos, los locales podían ser favoritos, pero el encuentro, con todo ello había que ganarlo. Y el cuadro de Alfaro se puso a ello desde bien pronto. A los dos minutos llegó la primera, con un cabezazo al larguero de Piovaccari tras un buen centro desde la derecha. Los blanquiverdes habían entrado bien en el partido, pero el Albacete reaccionaría pronto.

Una buena internada por la izquierda de su ataque le llegó a Manu Fuster en el interior del área, pero su remate se fue fuera. El primer tiempo se fue consumiendo y con la aparición de la lluvia el partido se igualó más de lo que en ese momento estaba. Incluso el Albacete dio un buen susto tras una buena llegada que tuvo que cortar Farrando para evitar males mayores. En los compases finales del primer tiempo fue Samu Delgado el que pudo marcar, pero chutó inocentemente a las manos de Bernabé.

La segunda parte arrancaría con una llegada del Albacete por la derecha protagonizada por Álvaro Jiménez, pero su disparo lo abortó Edu Frías con una buena parada a mano cambiada. No le gustó el arranque de la segunda parte a Pablo Alfaro que movió ficha pronto y le daría resultado, pues el gol llegaría tras ellos. Una buena asistencia de Javi Flores el balón llegaba a los pies de Samu Delgado que ponía un ‘pase de la muerte’ que acabaría en la red con suspense tras desviar la trayectoria Boyomo.

El Albacete lo intentaría hasta el final. Alejandro Menéndez movió el banquillo y metió toda la pólvora que tenía en el campo. Y casi logra forzar la prórroga si Edu Frías, ya casi con el minuto 90 cumplido y junto a la inestimable ayuda del palo lo evitase, para así confirmarse el pase a la siguiente ronda, que abrirá el mes de enero.