La Rosaleda recibía a la UD Logroñés seis meses después. Esta vez con el equipo en Segunda División y enfrentándose al Málaga CF. Se veían dos equipos con una mala dinámica y con la necesidad de volver a la senda de la victoria. Finalmente el encuentro acabó con un empate a cero y sin mucho que contar en cuanto a ocasiones y juego, pero mucho sobre el VAR.
El Málaga deja un puntazo en casa después de hacer un esfuerzo inmenso al jugar más de cuarenta y cinco minutos con un hombre menos y aguantar con la portería a cero. En cambio el Logroñés se va a casa con la sensación de no haber podido aprovechar esa superioridad en el campo.
En una primera mitad con muchas caras, aunque la peor se la llevó el Málaga. Un dominio intermitente en los primeros compases de partido que acabó, primero, con una sutil sacada de cabeza riojana y con un dominio suficiente malagueño. Cuando Joaquín y Rahmani protagonizaban alguna acción era peligrosa. Cristian también llegó a poner en riesgo la portería defendida por Dani Giménez. Eso sí, probablemente la ocasión más clara en los primeros cuarenta y cinco fue la de Andy en los últimos instantes de la primera mitad, pero la bola fue directa al palo. El verdadero giro llegó en el minuto 36, donde una vez más el VAR dará que hablar.
Todo empezaba como una acción mundana en cualquier encuentro. Una obstrucción de Iñaki sobre Rahmani que finalizó el colegiado señalando falta a favor del Málaga. Cuando el jugador local se disponía a efectuar el lanzamiento el VAR llamó al colegiado para revisar la acción. Para sorpresa de muchos, sino de todos, el árbitro decidió que Yanis Rahmani tenía que ser expulsado por golpear con intención a Iñaki en esa misma jugada. Esa decisión iba a ser un autentico dolor de cabeza para Sergio Pellicer ya que sobre el verde solo tenía siete fichas profesionales y Escassi con amarilla.
Aunque dejando las decisiones para los entrenadores, se esperaba que el Logroñés saliera con otra cara después del descanso. Aunque les costó hacer valer esa superioridad. Aun con los cambios de Sergio Rodríguez el Málaga estaba pudiendo controlar al Logroñés. La verdad es que no parecía que en uno de los dos equipos jugara con uno menos.
Finalmente, Ander Vitoria encontró el hueco en la portería de Dani Barrio aunque por medio hombro no subió el gol al marcador. No le estaban saliendo las cosas como querría el Logroñés y eso se podría achacar a una mala lectura del partido o a un encaro no demasiado bueno, sobre todo en los segundos cuarenta y cinco minutos. Ese punto no les servía a ninguno de los dos equipos, aunque mejor era sumar algo que seguir de cero en cero una jornada más. Probablemente sacia más al Málaga que sigue en la duodécima posición con 26 puntos. Con dos menos está el Logroñés en la 24ª plaza.