Triste empate para despedir el año

Cádiz y Valladolid despedían el año en un encuentro de los denominados de «la otra Liga», esa que juegan los humildes y cuyo premio final es la permanencia. Eso sí, los locales llegaban con una situación mucho más desahogada que el Valladolid que marcha en puestos de descenso desde prácticamente el inicio de la Liga. Mucho más meritoria la trayectoria de los gaditanos que han sido capaces de ganar a Real Madrid y Barcelona, aunque desde ese triunfo acumulan 3 derrotas consecutivas y sin ver portería.

Salieron dominadores los de Sergio que desde el principio se adueñaron de la pelota. Y ya en el primer minuto se pudo adelantar pero el cabezazo de Weissman se estrelló en el larguero. Al poco respondió Negredo con otro cabezazo que se fue por poco y acto seguido Masip sacaba un disparo de Lozano. Poco más de los dos equipos en ataque en los primeros cuarenta y cinco minutos. El Valladolid acumulaba posesión pero era incapaz de generar ocasiones claras. Mientras los gaditanos se defendían con orden pero apenas daban señales de vida en ataque, sin crear peligro por las bandas fiaba todo a la conexión Lozano- Negredo.

La segunda parte fue más de lo mismo  y podía decirse que se jugó sin porterías. Partido muy trabado, posesión estéril pucelana y los gaditanos a la espera de una contra para llevarse el partido.

Álvaro intentó cambiar la dinámica refrescando las bandas pero seguía sin generar peligro. Por su parte Sergio dió entrada a Toni Villa  y Diogo Jota buscando mayor profundidad en banda y más juego interior con el portugués. Por momentos parecía que el partido se animaba un poco fruto del cansancio y el carrusel de cambios. Jairo por los locales y Toni Villa por los visitantes animaban un poco los respectivos ataques. Un remate de Espino tras la enésima pérdida de Guardiola pudo dejr los puntos en casa pero respondió Masip bien colocado. Al final resultado justo, ninguno de los dos mereció marcar ni jugó para lograrlo.