Igualdad táctica y reparto justo de puntos
Granada y Celta firmaron tablas esta noche en Los Cármenes. La igualdad marcó la tónica de un partido aburrido para el espectador, pero que sirve a ambos conjuntos para seguir sumando.
Insípida primera parte
Comenzaba el encuentro en el Nuevo Los Cármenes con un Celta dominando la posesión, pero tímido en ataque. Los celestes buscaban pases verticales que conectaran con Iago Aspas, quien volvía tras lesión, pero siempre era bien presionado por la zaga nazarí. Así, no sería hasta bien entrado el primer tiempo cuando Fran Beltrán probaba por primera vez a Rui Silva, con un lejano disparo que detenía el portugués sin mayor dificultad. Los de Coudet se estaban haciendo con el centro del campo, dejando sin opciones a un Granada que buscaba hacer daño por las bandas, pero sin fortuna.
Así, los de Diego Martínez fueron creciendo poco a poco en el partido, y Kenedy fue de los pocos animadores del mismo, conectando un potente disparo que se marchaba desviado e, instantes después, propiciando una buena ocasión que era desaprovechada por Fede Vico. También lo intentó Foulquier, pero se topó con Rubén Blanco.
Las defensas y la falta de desborde protagonizaron una primera parte muy estéril, en la que las ocasiones claras brillaron por su ausencia. Quizás el Granada acusó el desgaste de la Copa del Rey y la acumulación de partidos, mientras que los celestes no lograron activar a Aspas, su principal baza ofensiva. Los primeros cuarenta y cinco minutos morían en un remate de Araujo a centro de Brais, que se marchaba por línea de fondo.
Animada segunda mitad
Arrancó con más ritmo el segundo tiempo, y a punto estuvo el Celta de anotar el primer gol en el inicio. Una gran jugada por banda derecha entre Brais, Iago y Hugo, terminaba con este último asistiendo desde línea de fondo a Nolito, quien no acertó en su remate. Insistían los vigueses por medio de Aspas, aunque su disparo se marchaba ligeramente desviado.
Los locales no tardaron en contestar, con un muy activo Darwin Machís. Buscaba el Granada a balón parado el tanto, pero Renato Tapia cortaba cualquier atisbo de peligro. Sin embargo, el delantero venezolano logró hacerse con espacio e hizo esmerarse a Rubén con una gran parada.
Llegada la hora de partido, Coudet dio entrada a Augusto Solari, reciente fichaje que hacía su debut en LaLiga Santander, así como a Holsgrove, buscando frescura y verticalidad en tres cuartos de campo. Diego Martínez también movía el banquillo, metiendo a Roberto Soldado.
Así, Kenedy se atrevía a lanzar de forma directa una falta lejana, pero Rubén Blanco contestaba con gran solvencia. Sin duda, el portero de Mos fue uno de los protagonistas del enfrentamiento.
Tuvo la oportunidad de debutar con gol Solari. Tras una gran combinación entre Aarón Martín y Iago Aspas, le llegaba el esférico al argentino, quien decidió prolongar hacia Hugo Mallo cuando lo más sencillo hubiese sido tirar a puerta.
Con más intentos que aciertos, llegaba el pitido final de un partido marcado por la igualdad. Empate justo, que deja al Granada séptimo y permite al Celta seguir sumando.