Abelardo no frena la hemorragia babazorra
El asturiano suma seis partidos de liga como entrenador alavesista, donde solo ha sumado 4 puntos.
Cuando el Alavés destituyó a Pablo Machín a principios de enero la noticia causó cierta sorpresa. Aunque el juego del conjunto babazorro no era bueno y despertaba críticas, el equipo estaba fuera de descenso con unos números mejorables pero nada dramáticos. El Alavés tenía 18 puntos y estaba uno por encima del descenso. Había anotado 16 goles, que era casi uno por partidos, y encajado 22. Es decir, 1,2 por partidos (5 goles cada 4 partidos).
A pesar de todo ello se optó por el cese y el regreso de un viejo conocido, Abelardo Fernández que ya había logrado reconducir una situación mucho más complicada. Debutó con una debacle casi histórica en Copa. Pero era eso, Copa. En liga debutó con derrota 1-2 frente al Sevilla y posteriormente 1-4 frente al Real Madrid. Tras eso llegó su mejor momento con un empate sin goles en Getafe y una victoria por la mínima frente al Real Valladolid. Cuatro puntos y dos porterías a cero frente a dos rivales directos hablaban de cierta mejoría.
Pero ahora que el calendario se volvía a recrudecer, el Alavés ha vuelto a hacer aguas. Frente al FC Barcelona encajó 5 goles y frente a una Real Sociedad que venía tocada de Europa, cuatro. El equipo vuelve a estar a solo un punto por encima del descenso y con Abelardo encaja mucho más, 16 goles en 6 partidos, y marca más o menos lo mismo (4 goles en 6 partidos).
Aunque no toda la culpa es del técnico asturiano, que le ha tocado lidiar con una fase del calendario complicada; lo cierto es que Abelardo no ha sido la solución esperada a los problemas babazorros. El equipo no ha mejorado su faceta ofensiva; la defensiva, con el condicionante de los rivales, va a peor y el juego sigue siendo poco vistoso de ver. Los próximos tres partidos se antojan clave para anticipar el futuro a corto plazo del Alavés. Osasuna y Cádiz pasarán por Mendizorroza y entre medias una visita al Benito Villamarín.