Festín perico en ‘el partido de las desgracias’ del Fuenla
Victoria clara del Espanyol para seguir líder ante un Fuenla al que desde el principio le fueron persiguiendo las 'desgracias'
El RCD Espanyol defiendía en la jornada 32 de LaLiga SmartBank el liderato recién estrenado y lo defendía ante un Fuenlabrada que fue el artífice de su ascenso a lo más alto, al derrotar a un Mallorca que ahora buscará recuperarse en un duelo directo contra el Leganés. El parón internacional y el COVID-19 no permtía desplegar el once de campanillas de Vicente Moreno, con las bajas de Pedrosa y Puado por el primer motivo y las de Melendo y Lluís López por el dichoso bicho. También el conjutno azulón tuvo que volver esquivar las bajas. Importantes, como la de Juanma, santo y seña y decodificador del equipo.
A pesar de que los primeros acercmientos del encuentro en el RCDE Stadium serían para los madrileños, la primera ocasión clara del partido sería para el conjunto local. Al palo De Tomás. Voló a la contra el conjunto catalán; le bastaron tres pases para habilitar el zurdazo de RDT desde la frontal, que tocó en Dimata y se marchó al palo, evitando posteriormente el tanto Rosic.
El Fuenla comenzó con fuerza y haciendo replegarse a los pericos, pero la calidad de estos hacía que con poco generasen mucho peligro en la meta de Rosic. Las entradas por banda de los locales ponían a prueba al Fuenla. Así, apertura de Dimata a banda derecha para la incorporación de Óscar Gil. Cabeceó con el balón demasiado encima el pichichi perico RDT. Poco después, recibió Darder sobre la frontal, se acomodó el golpeo y soltó el derechazo, que buscaba la cepa del poste.
Jugada con polémica en el minuto 15′. Sacó sobre la línea Nteka un balón que se colaba en la meta de Rosic. Los locales reclamaban mano o gol y, tras revisarlo él mismo en el VAR, Galech Apezteguía decretó mano y por lo tanto roja directa para el jugador azulón. Desde los once metros no falló RDT que la mandó al moflete derecho de la portería, con total autoridad.
Las malas noticias no venían solas para los azulones ya que poco después no pudo continuar sobre el terreno de juego Pinchi por lesión. Y como las desgracias nunca vienen solas, llegó el segundo. Le filtró un balón de esos de tiralíneas David López a Embarba, haciendo bueno un desmarque con mucha mala uva para que superase a Rosic en el mano a mano con más potencia que colocación.
Se estaba gustando el Espanyol ante un Fuenla tocado y llegaría el tercero de la forma más dolorosa para los madrileños. Jugadón de Darder al que la defensa azulona se lo puso fácil. Arrancó sobre la frontal y fue dejando atrás rivales en conducción como si de conos se tratasen, para plantarse en área pequeña. Le pegó duro, ya que estaba algo escorado, y Pulido, que estorbó a Rosic, acabó por ponerle el broche, sin querer, a la jugada.
Con la clara ventaja para los locales en el marcador y los visitantes tocados se llegaba al descanso.
Ya en el segundo tiempo salió con garra el conjunto madrileño que no se daba por vencido. El primero en poner a prueba a Diego López fue Iban Salvador. Pero en un partido de ‘desgracias’ para los madrileños otro contratiempo en forma de lesión obligaría a Oltra a mover banquillo. Iribas se retiraba y entraba Sotillos. Estaba trabado el partido en los primeros compases del segundo tiempo.
El ritmo del partido bajó pero no el de goles y es que llegaría el cuarto para los blanquiazules. Engrosa la cuenta el Espanyol, también la de sus desgracias el Fuenlabrada. Puso el centro Dídac, se chochó Rosic con Diéguez a la hora de despejar, y el balón le quedó con lazo a RDT, que lo empujó a placer a la portería.
En la réplica, probó Fuentes. Quedó un balón botando en la frontal, con mucha altura, pero consiguió armar la volea el centrocampista peruano, que a punto estuvo de hacer un golazo. Últimos minutos con acercamientos pero sin movimientos en el marcador. El Espanyol ganaba con solvencia para seguir líder ante un Fuenla al que el partido se le complicó desde el principio.