Sekou, el ‘9’ que cierra el ataque malagueño
"La Pantera" llega a Málaga cedido por el Real Valladolid para hacer rugir a la afición con sus goles
El jugador senegalés Sekou Gassama Cissokho (Granollers, Barcelona, 06/05/1995), es el 9 que estaba buscando el Málaga para cerrar su ataque. Esto es lo que andaba buscando el Málaga desde hace tiempo. Además, conoce bastante bien la categoría, ya que ha jugado en ella un gran número de partidos. Este jugador estará cedido durante esta temporada al igual que otros de los fichajes que se han incorporado al conjunto blanquiazul.
Trayectoria de Sekou
Sekou empezó en la cantera del Barça por 2007, y años después se fue a la Damm Juvenil donde creció bastante. Tanto fue así, que se marcho al Almería B en 2013. Para luego pasar por las canteras del Valladolid y Rayo. Después, pasó por diferentes equipos de lo que fue Segunda B. En este tiempo jugó en el Bergantiños FC, CF Badalona y Sant Andreu, para volver al Almería B. Ya en el verano de 2018, consigue estar y jugar en el primer equipo. Aunque poco iba a durar ya que se iría cedido al Valencia Mestalla. Tras el final de la cesión, el Valladolid lo ficha por 400 mil, para cederlo al Fuenlabrada durante dos temporadas en las que ha crecido y se a revalorizado. Ahora, ha vuelto al club vallisoletano, y el Málaga se fijó en él, y ha conseguido que lo vuelvan a ceder.
Sobre las esta estadísticas de este jugador, destacan: Los 44 partidos en Segunda, en los que marcó 14 goles y dio una asistencia, la mayoría con el Almería. A nivel de selección solo ha jugado un partido con la Sub 20 de Senegal, cuando fue convocado para la Copa de África en 2015.
Así juega Sekou
Es un delantero nato, y por tanto tiene olfato de gol. Asimismo, es un delantero corpulento y alto por tanto maneja bien el jugo aéreo, ya que consigue controlar el balón con facilidad. Y por otra parte, tiene un gran físico que le permite ganar velocidad a base de largas zancadas que hace que los defensas no lo puedan parar si no es con falta. En cuanto a los corners es clave ya que sabe rematar bien de cabeza. Además está atento a cualquier posible rechace para marcar, por tanto no da un balón por perdido y lo lucha hasta el final. Y La Rosaleda ya lo ha sufrido cuando jugó con el Almería.
Por todo ello, el aficionado boquerón espera ver ese derroche físico y celebrar sus goles como lo ha ido haciendo en otros clubes.