Rotundo triunfo del Almería ante un Zaragoza que no caía lejos de La Romareda desde el mes de agosto, cuando lo hacía a orillas del Pisuerga. Una victoria rojiblanca con la que los unionistas se reencuentran con los tres puntos tras los dos últimos empates y que encadena su décima, nada más y nada menos, sumando. Un resultado con el que el conjunto indálico se reafirma aún más como el líder intratable en el fútbol de plata español. Y un encuentro que se salda también con Sadiq, el máximo anotador del plantel local, poniendo fin a su sequía de cara a puerta.

En tierras almerienses se daban cita dos de los equipos que en mejor estado de forma están de la categoría. El mejor local contra el tercer mejor visitante. Un Almería que volvía a casa después de tropezar en Fuenlabrada, pero enlazando su noveno partido sumando. Y un Zaragoza que venía de imponerse en La Romareda ante el Eibar, otro de los gallitos de este fútbol de plata español. Un encuentro entre rojiblancos y blanquillos que a primera vista difícilmente podía tener más alicientes de cara al espectador.

El conjunto local no quería dejar pasar la oportunidad de retornar a la senda del triunfo. Eran los rojiblancos los autores de las primeras ocasiones de la contienda, sin excesivo peligro eso sí. Apenas tocaba bola el conjunto maño durante los primeros compases. Pero tras cinco minutos de asedio almeriense los visitantes lograban tener algo más de balón. Le estaba costando a ambos equipos probar al meta rival. Transcurridos los diez primeros minutos los arqueros todavía no habían tenido que intervenir.

Llegado el cuarto de hora la tenía el Zaragoza a la salida de un saque de esquina, pero el remate de Álvaro Giménez se marchaba fuera. Un conjunto aragonés en el que minutos después daba el susto Petrovic, quien necesitaba de la atención de las asistencias médicas por un choque con Samú Costa. Los dos equipos buscaban el gol con firmeza, si bien las defensas no permitían disparar a puerta. Apenas restaban cinco minutos de juego cuando Arnau se plantaba ante Cristian Álvarez tras un ligero toque de cabeza de Sadiq en un balón puesto en largo, pero cuando veía que el balón se le estaba yendo largo el centrocampista catalán se dejaba caer.

Minutos más tarde la volvería a tener Arnau, pero esta vez su disparo se estrellaba en el cuerpo del guardameta. Prácticamente en la siguiente jugada probaba Sadiq en un contra, pero el nigeriano picaba la bola cuando se le estaban acabando los metros de campo. Un Sadiq, máximo goleador rojiblanco, que no atravesaba por su mejor racha anotadora. Los almerienses estaban dominando sobre la hierba del Estadio de los Juegos Mediterráneos, pero la falta de efectividad le estaba privando del triunfo.

Muy cerca estuvo de llegar el gol local cuando se entraba en el tiempo de descuento. Pase filtrado a Sadiq que después de tocar en un defensor recibe, se planta ante el meta y dos defensas, la da a Portillo, pero se le queda atrás al malagueño. Poco más tarde probaría Lazo en una triangulación tras pérdida, marchándose el chut del gaditano muy alto. Le estaba costando a los almerienses romper el candado de la portería maña. Sin goles y con el resultado de gafas en el electrónico se llegaba al tiempo de descanso. Un primer tiempo en el que las mejores ocasiones tuvieron color rojiblanco.

El segundo tiempo arrancaba con la primera permuta en las filas visitantes, dando entrada JIM a Nano Mesa en sustitución de James. Fue Portillo quien tuvo la primera del segundo tiempo, pero el disparo del malagueño se marchaba por alto. Se estaba resistiendo el gol en el Estadio de los Juegos Mediterráneos. Minutos más tarde tendría el Almería una doble ocasión que entre el portero primero y la defensa después desviaban a saque de esquina. Una acción en la que lo intentaba primero Arnau para acto seguido Samú Costa. Un acción en la que tuvo su importancia Sadiq, ya que de no quedarse protestando podría haber rematado en segunda instancia.

Sadiq se reencuentra con el camino del gol

De tanto intentarlo llegaría el primero del gol. Sadiq se aprovechaba de la falta de entendimiento entre el meta y Francés para plantarse solo ante la portería vacía. El nigeriano ponía fin a una racha de siete partidos ligueros sin anotar. El delantero africano se sacaba todo un peso de encima. La locura se desataba entre la parroquia rojiblanca viendo como su equipo se estaba reencontrando con el triunfo. Un Almería que está intratable en casa, donde hasta la fecha no ha caído derrotado vez alguna durante esta temporada.

Se le complicaba el partido al conjunto maño, que no caía lejos de La Romareda desde el mes de agosto. El duelo entre el mejor local y uno de los mejores visitantes se lo estaban llevando con mérito los rojiblancos. La escuadra blanquilla, que hoy vestía la camiseta de la avispa, no se daba por vencida, si bien apenas inquietaban la portería defendida por Fernando. Un Almería que a falta de cinco minutos del final iba sentenciar. Contraataque local, Ramazani recibía, la ponía de tacón y Pozo ya en el área batía a Cristian Álvarez para firmar su tercer tanto del curso. Jugada de brillantez para finiquitar el encuentro en tierras almerienses.

A pesar de la cómoda ventaja, los almerienses seguían buscando la portería rival con la firma intención de hacer el tercero. Un tercero que lo tuvo Ramazani en un nuevo contragolpe conducido por Pozo. El belga probaba fortuna, sacándola con el pie el arquero. Un Ramazani que finalmente sumaría el tercero al tanteador. El belga aprovechaba la asistencia de Samú Costa para solo ante el meta no perdonar y sumar su quinto tanto con baile incluido. Un tanto que servía para redondear la fiesta rojiblanca, que encadenaba su décima jornada puntuando. Un Almería que últimamente no hay quien lo pare y que despedirá el año sin caer en su feudo, haciendo efecto su papel de mejor local de la categoría.

Un encuentro que se saldaba con la rotunda victoria rojiblanca, si bien los dos últimos tantos llegaron en el tramo final. Un resultado con el que se pone fin a los buenos números que presentaba el conjunto maño lejos de la capital de Aragón. Un Zaragoza que no caía a domicilio desde el mes de agosto, cuando en la jornada 2 perdía ante el Valladolid en el José Zorrilla. Una victoria almeriense que viene a confirmar una vez más el gran estado de forma por el que este curso está atravesando el conjunto de Rubi. Un Almería que se prolonga hasta los 45 puntos en la clasificación para hacerse más líder si cabe.