El Osasuna aprovecha los errores del Levante para llevarse la victoria

El choque comenzó sin un dominador claro y con varias interrupciones. El conjunto local propuso su juego característico en casa, es decir, presión arriba en salida de balón, juego directo y profundizando por los costados. Mientras tanto, el Levante cuando tuvo el balón intentó elaborar de forma más larga pero de forma inofensiva y sin profundizar y progresar con el esférico en zonas peligrosas.

La primera ocasión de peligro la tuvo un ex jugador granota como es Rubén García. Pérdida del canterano Marc Pubill en la frontal del área, que robó el catorce rojillo. Y este, sin pensarlo, recortó hacia su pierna menos hábil y conectó un disparó con curva al palo largo que terminó tocando el larguero.

Llegaron los primeros 35 minutos y la tónica era la igualdad. Los protagonistas estaban siendo los defensas por parte de ambos. En el conjunto rojillo Juan Cruz cuajó una gran primera parte, logrando muchas intercepciones, y respecto al Levante los destacados fueron Rober Pier y Vezo, qué despejaban y se anticipaban a los balones aéreos y a la espalda.

El Osasuna no paró de colgar balones al área durante toda la primera parte. En una de esas tuvo una buena oportunidad para adelantarse. Centro desde 30 metros de Chimy Ávila al área pequeña del Levante para que Budimir rematará un testarazo que se marchó por encima de la portería de Cárdenas.

La primera parte se cerró con un gol del Osasuna para adelantarse en el marcador. La jugada fue de banda a banda tocando en cuatro futbolistas rojillo. Pase filtrado de Manu a Brasanac que se fue de su defensor, Vezo, para plantarse en el área y pasarla a Budimir, que se encontraba en torno al punto de penalti. Se encontraba rodeado por los defensores y tuvo la cabeza fría para levantarla y ver que su compañero argentino estaba solo en su costado derecho. Por lo que asistió a Chimy Ávila para que conectase un chute potente raso para marcar el primer gol.

Los segundos cuarenta y cinco minutos empezaron de manera sensacional para los locales. Volverían a ver puerta tras un error grotesco del defensor uruguayo. Tras una falta a favor para el Levante, Cáceres quiso poner el balón en juego de manera rápida enviando un melón a Rober Pier. Rubén García estuvo muy vivo y robo para luego filtrar un pase a Budimir, y así dejarle mano a mano ante Dani Cárdenas. El delantero con sangre fría batió de manera cómoda al portero.

Osasuna no se echó para atrás teniendo una renta de dos goles de diferencia, sino todo lo contrario. Olió sangre granota y siguió apretando arriba. Y en una de esas acciones anotaría el tercero en el marcador. El centrocampista serbio, Brasanac, tuvo recompensa tras estar todo el partido apretando arriba. Robo el esférico en la frontal del área y se internó dentro para batir a Cárdenas con un disparó cruzado con su pierna izquierda.

El Levante pudo abrir su casilla en el marcador con una gran acción colectiva. Malsa lanzó en largo a la carrera de Cantero a la espalda del lateral izquierdo rojillo. El canterano granota profundizo por la banda hasta centrar al punto de penalti, donde se encontraba Roberto Soldado, y al primer toque dejó de cara para Roger y disparó de primeras al palo largo y perforó la portería de Sergio Herrera.

Kike García que entró en la segunda parte quería su gol. Tuvo dos acciones tremendas en apenas cinco minutos para perforar la portería granota. La primera acción fue un centro al área que remató de volea y se marchó rozando el travesaño. Y la siguiente una acción individual yéndose de los dos centrales y chutando un disparó potente con su pierna izquierda que se marchó rozando el palo.

El partido terminó con los locales apretando al Levante para buscar más goles, pero el portero granota tuvo que esforzarse para no encajar más goles. Victoria merecida del Osasuna, que fue más sólido defensivamente que su rival, que tuvo muchos errores que le costaron los tres puntos. El Levante sigue siendo el colista de La Liga una jornada más y solo quedan 27 puntos disponibles para sumar.