El Valladolid quiere el ascenso directo
Vencen en Ipurua, donde nadie ganaba desde agosto como visitante y se coloca a dos puntos de los armeros que se quedan sin margen en la tabla
Partido grande en Ipurua. Partido con muchas cosas en juego ya que llegaba a la fortaleza armera un Real Valladolid muy necesitado tras la fuerte sacudida que fue el perder con el Sanse la semana pasada. A los blanquvioletas solo les bastaba ganar para tener opciones tangibles de poder alcanzar el ascenso directo y así lo hicieron, con justicia, derrotando al Eibar en su casa; algo que no ocurría desde la jornada 2 cuando lo hizo la Ponferradina. Los armeros siguen en ascenso directo, pero pierden el liderato y se quedan sin colchón, pues el Real Valladolid se queda ahora a dos puntos de la segunda plaza.
Como principal necesitado, fue el Valladolid quien se mostró más propositivo al arranque del choque. Suyo fue el dominio, ante un Eibar que esperaba a que los espacios apareciesen con la calidad de Edu Expósito y Stoichkov para resolver. Pero ni uno ni otro lograron lo que buscaban. El dominio fue de los blanquivioletas, sí, pero no generaron ni una sola ocasión de peligro porque los muchos centros al área que logró poner no encontraron rematador nunca. Tampoco los armeros en todo el primer tiempo llevaron claro peligro. Un disparo de Javi Muñoz que cortó El Yamiq y un remate alto de Chema fue lo más destacable en el bando local.
Lo que sí hubo en la primera parte fue quizá un exceso de revoluciones. Milla Alvendiz tiró pronto de su tarjetero para contener un partido en el que ninguno de los dos equipos rehuyó el meter la pierna a las disputas. Cuatro tarjetas, que pudieron ser más, se vieron y bastante cabreo en el bando local por una acción en la que Nacho pudo haber visto la segunda amarilla y dejar a su equipo con uno menos. Lo llevó bien el colegiado sevillano a pesar de que ambos se lo querían poner difícil.
Tras el descanso el partido pareció animarse. El Eibar salió con fuerza y Stoichkov no logró conectar con Llorente en una clara ocasión. Esa fue respondida con un disparo de Aguado que se fue cerca del poste derecho de Cantero. Pero la más clara llegaría al 66′ cuando, una falta lateral botada por Plata, va cerrada, nadie la toca y el propio portero armero saca una mano abajo de mucho mérito para evitar el 0-1. Sin embargo, en el saque del córner sucesivo, Stoichkov corta el centro con el brazo y Milla Alvendiz no duda en señalar una pena máxima que Nacho transforma en el 0-1.
Tras el gol, el Eibar dio un paso adelante, obligado por el marcador. Su conservadurismo, esperando a que el conjunto pucelano se abriese no le funcionó y ahora debía exponer más. Fue entonces el equipo de Pacheta el que adoptó esa táctica de correr a los espacios y obtuvo premio al minuto 80. Una buena acción de un Anuar excelso que dejó a Sergio Álvarez atrás y asistió a Weissman que fusiló a bocajarro a Ander Cantero para poner el 0-2.
Garitano quemó entonces todas las naves que le quedaban en el banquillo para intentar rescatar algo a la heroica. Pero el cuadro blanquivioleta supo cerrar bien su área e incluso, siempre guiados por Anuar, salir con cierto peligro a la contra, aunque sin crear ocasiones que moviesen más el marcador. La próxima semana éstos visitan Butarque el sábado a las 21:00 horas. Por su parte, los vallisoletanos reciben a una SD Ponferradina que busca entrar en puestos de play-off ese mismo sábado, pero a las 18:15 horas.