Este domingo 22 de mayo se jugaban el campeonato de la Premier League 21-22, el Liverpool recibía al Wolverhampton, mientras que el conjunto dirigido por Pep Guardiola recibía al Aston Villa de Steven Gerard.
Los “skyblues” arrancaron el encuentro nervioso, fallando pases que muy difícilmente se ve en un equipo de Guardiola, el Villa bien ordenado atrás, cerrando los carriles centrales, obligando al City a jugar en horizontal y generando transiciones ofensivas peligrosas. Por su parte el City que jugaba con el resultado a favor ya que el Liverpool perdía 0-1, insistía tratando de generar con un Mahrez y un De Bruyne que empujaba para ponerse al frente en el marcador, hasta que en los minutos finales del primer tiempo el Villa en un contragolpe ponía el 0-1 de la mano de Matty Cash que hacía temblar Etihad. En el segundo tiempo Pep metió a Zinchenko por un Fernandinho que había arrancado de central por la ausencia del lesionado Rubén Días y que se notaba que no estaba cómodo. Zinchenko arranco bien, generando ocasiones en banda izquierda y amplitud al campo, pero seguía sin ser suficiente y un Etihad que cada vez se notaba más tenso, pues en el otro partido, el Liverpool ya había empatado y bastaba con un gol de los dirigidos por Klopp para que el Liverpool fuera campeón. El City seguía generando llegadas, pero no era suficiente en un contragolpe en el minuto de 69 Coutinho, ex Liverpool ponía el 0-2 que enmudeció Manchester y hacía temblar a los de Guardiola, que recién había hecho entrar a Gundogan y que en el minuto 76 ponía el 1-2 con el que empezaba la remontada. Rodri en el minuto 78 puso el empate en el marcador tras una gran jugada colectiva de los “skyblues” y que regresaba la ilusión a los aficionados en el estadio, Gundogan al 81 culminó la remontada gracias a un gran pase de Kevin De Bruyne con el que el City aseguraba el título del campeonato inglés.
Sergi Castillo
Twitter: @iSergi_Castillo
Foto: Manchester City