Para volver a sonreír, hubo que sufrir
Fin a la mala dinámica. El Real Zaragoza recupera la sonrisa gracias a su victoria sobre la bocina contra el Villarreal B. Un gol en el descuento del capitán zaragocista, Zapater, daba una vida extra al técnico del conjunto maño que volvía a la victoria y salvaba su puesto. El triunfo evitaba que cayese el cuadro local al descenso. Una victoria con una mejor imagen pero sin tirar cohetes. El conjunto maño, con la victoria sobre el conjunto castellonense, rompía una racha negativa de cuatro jornadas consecutivas sin ganar.
El duelo comenzó con los locales llegando a la meta de Filip Jorgensen pero sin generar excesivo peligro y con llegadas defectuosas. En el área contraria, poca actividad. No tuvieron los groguets demasiadas opciones de poner a prueba a Cristian Álvarez. Solo tuvieron una clara en los primeros 45 minutos, un remate de Carlo García desde la corona del área en el 23 que se marchó fuera por poco.
Con un ambiente caldeado en la grada avanzaban los minutos. En el 36 le fue anulado un gol a Pape Gueye porque el balón había salido en el centro previo, en el 38 Valentín Vada remató con potencia desde el borde del área ajustado al poste y en el 45, de nuevo Gueye, cabeceó al larguero una falta botada por Manu Molina que dio en la cabeza del cancerbero visitante y se fue a córner.
Parecía que el premio debía llegar para el Real Zaragoza y lo hizo en el saque siguiente cuando Vada lo ejecutó y le puso el balón a Jaume Grau en el corazón del área para que el mediocentro no perdonara.
Ya en el segundo tiempo, dio un paso adelante el filial que quería ir a por la remontada. Se hizo con el esférico y sin asediar si tuvo una doble ocasión de Del Moral junto al palo, que salvó el meta zaragocista en el 61. En la réplica, pudo llegar el segundo en el 66 con un centro de la muerte de Gaizka Larrazábal para Iván Azón que, en boca de gol, no precisó el punta.
El Villarreal B no perdonaba y Tasende hacía el gol del empate tras un centro de Miguel Ángel Leal. No pasaba gran cosa en el duelo. Pero el conjunto maño supo aprovechar la única ocasión que tuvo en el 92.20 para poner el 2-1 con una llegada de Zapater al corazón del área tras conseguir rematar un centro raso de Iván Azón.