Brasil se estrena a lo grande
Richarlison fue el protagonista en la victoria de la "Canarinha" sobre Serbia con un doblete y un gol de bella factura
Brasil comienza de dulce en este Mundial tras pasar por encima de la selección serbia. Serbia apostó por resistir la ofensiva brasileña y acabó sucumbiendo. Culpa de un Richarlison que estuvo inspirado de cara a puerta, de hecho dejó el mejor gol de lo que llevamos de mundial. Brasil demostró ser una de las favoritas, sino la más, y pudimos ver todo el arsenal de ataque que tiene. Serbia dio por bueno terminar solo dos por debajo, ya que pudieron ser más y esto podría ser determinante a la hora de comparar «goal average». Brasil lidera su grupo junto a Suiza.
El partido comenzó con una Brasil muy agresiva presionando la salida serbia. La selección europea también iba arriba a buscar a los sudamericanos. Los serbios buscaban un juego muy directo sin arriesgar demasiado atrás. Cuando podía combinar en campo rival daba cierta sensación de peligro. Pero, Brasil robaba y si conseguía correr generaba acercamientos. El partido tenía ritmo y ninguna de las dos lograba hacerse con el control del balón. La primera ocasión fue para Brasil, Neymar intentaba meter un gol olímpico y el meta serbio tenía que despejar a saque de esquina de nuevo. El partido empezaba a perder ritmo y no se producían ocasiones.
Poco a poco se hacía con el balón Serbia, buscaban defender con la pelota para alejar a las estrellas brasileñas de su área. A Brasil le estaba costando mucho pisar área, pero empezaba a dominar más el balón. Ahora era Casemiro quién probaba desde lejos, pero fácil para Milenkovic-Savic. Brasil se plantó en campo rival, pero Serbia no cedía en defensa y esperaba su momento para lanzar una contra. La primera la condujo Tadic que buscó un centro para Mitrovic que atajó sin problemas Alisson. De una portería a otra, Thiago Silva encontraba un hueco en la defensa serbia para habilitar a Vinicius, pero Milinkovic Savic anticipó en una buena salida. Otra para Brasil, Casemiro encontraba a Raphina en el área y este intentaba poner el balón al centro de esta, pero despejaba la defensa que estaba realizando un gran encuentro. El partido empezaba a ser un monólogo de ataque brasileño.
A Serbia lo le duraba nada la pelota. Y Brasil no paraba de atacar. Otra más, esta vez de Raphina que remató blandito tras una buena pared con Paquetá. Brasil no acertaba y Serbia volvía a manejar un poco más de balón. Un centro de carrilero a carrilero que acabó en las manos de Alisson la hacía despertar. Pero, esto fue un espejismo, pues la «Canariha» se asentaba de nuevo en área rival. Era un partido de momentos en los minutos finales de la primera mitad, Serbia cogía balón para respirar. Pero, Brasil recuperaba y buscaba portería rápido, de hecho Vinicius fallaba ante el portero serbio en una acción en la que los defensas europeos estuvieron muy poco contundentes. Y sin mucho más se llegó al final de una primera mitad en la que Brasil estuvo más cerca del gol, pero en la que no fue capaz de generar demasiado en ataque. Muy poco en la faceta ofensiva de los serbios, aunque mostraron un gran nivel defensivo.
La segunda parte comenzó con susto para Serbia. Milinkovic-Savic mandaba un balón complicado a Gudelj y este la perdía ante un Raphina que se quedaba solo ante el meta serbio, este arreglaba su error con una gran intervención. La dinámica del partido continuaba igual, monólogo ofensivo de Brasil. Neymar provocaba una falta peligrosa en la frontal cuando ya se colaba en ella. Él mismo la iba a lanzar, pero su disparo era desviado por la barrera. Brasil atacaba, pero el nivel que estaban mostrando los tres centrales serbios era muy destacable, una de las razones de que se mantuviera el empate. Otra para Brasil, otra para Neymar. Empezaba a aparecer Vinicius en el partido, este metía un buen balón para Neymar que remataba directamente fuera. Serbia no hacía nada más que achicar aguas.
El seleccionador serbio movía el banquillo buscando una reacción. Salían Gudelj y Zivkovic y entraban Radonjic e Ilic. Pero, nada cambió. Alex Sandro se sacó un zapatazo lejano que fue repelido por el poste derecho de la meta serbia, se volvía a salvar Serbia. Y como se estaba viendo venir llegó el primero de Brasil. Neymar penetraba en el área, se le iba largo el balón, pero Vinicius estaba muy listo y sacaba un disparo que paraba Milinkovic-Savic con tan mala suerte que el rechace era enviado a puerta vacía al fondo de la red por Richarlison. Al instante entró Vlahovic al terreno de juego, se le ponían las cosas difíciles a los europeos y había que sacar a un goleador puro. Pero, la siguiente de peligro y clara también fue para la «Canarinha». Neymar iniciaba una contra, le derribaban, pero le quedaba el balón Vinicius que resbalaba y no podía sacar el disparo.
Serbia reaccionaba y a través del balón parado hacía sufrir a Brasil. Marquinhos sacaba el balón en la línea de gol tras varios cabezazos en el área brasileña. Pero, esto iba a durar poco porque los sudamericanos lograban hacer el segundo. Un auténtico golazo. Vinicius ponía un centro con el exterior hacia Richarlison y este controlaba y sacaba un remate a media tijera que se iba al fondo de la red. El muro serbio volvía a caer. Los cambios mermaron el sistema defensivo europeo, pero estaba obligada a hacer algo más en ataque.
Seguía la fiesta brasileña, Casemiro estrellaba un disparo en el larguero. Serbia estaba en las últimas y Brasil quería más. De hecho, entraba al terreno de juego Maksimovic en lugar de Mitrovic para no recibir más y equilibrar más el equipo. Aún así, llegaban más oportunidades para la «Canarinha». En esta ocasión, fue Rodrygo quién disparó desde la frontal y se le fue ligeramente desviado por encima de la escuadra. Brasil se divertía y Serbia daba por bueno caer por dos de cara al «goal average» con el resto de equipos del grupo. Al final no hubo más goles y Brasil se confirma como una de las favoritas a ganar este campeonato.