En el epílogo, River ganó de carambola en Paraná

De visitante, River Plate venció por 1 a 0 a Patronato. El equipo de Marcelo Gallardo no logró mostrar mejoras en su juego, frente al local que, por momentos, pudo haberse puesto en ventaja, pero una gran actuación del golero, Franco Armani, sostuvo la paridad hasta los minutos finales. En la última jugada del partido, River encontró los 3 puntos que le dan algo de aire en la Superliga, y cierta tranquilidad para encarar la final de la Supercopa.

El primer tiempo comenzó con el visitante que parecía volcarse de lleno al ataque, con una buena sucesión de pases y rodeando el área del “Patrón”, pero sin llevar peligro al arco defendido por el veterano Sebastián Bértoli. Las buenas intenciones de “La Banda” duraron no más de 15 minutos, hasta que el partido se hizo intrascendente por parte de los dos equipos.

El traslado de Enzo Pérez, y algunos destellos del colombiano Juan Fernando Quintero le dieron a River la sensación de controlar el encuentro, sin embargo, las ocasiones no llegaban a concretarse más allá de tres cuartos de cancha para adelante. Promediando el final de la primera parte, el uruguayo Rodrigo Mora capturó un rebote, y sacó un buen zurdazo desde muy lejos que alcanzó a desvíar el arquero al córner, siendo ésta la situación de mayor peligro hasta el momento.

El complemento iba a ser el escenario de las situaciones más peligrosas por parte del local. El oriundo de Montevideo, Uruguay, Adrián Balboa, que había sido el mejor de Patronato en la primera mitad, tuvo las más claras para poner en ventaja a su equipo. Primero, tras un rebote en un córner, “Rocky” definió a quemarropa frente al arquero Armani, que de gran manera y a puro reflejo salvó el arco Millonario. Varios minutos más tarde, el mismo Balboa estuvo cerca nuevamente, pero sorprendentemente remató mordido y la pelota se fue por un costado.

Y así, todavía el resultado quedaba abierto para que alguno de los dos, en una jugada aislada, se llevara el triunfo, y el que lo logró fue la visita; casi sin quererlo, en un tiro de esquina que cayó en el medio del área de Patronato, ningún jugador de River logró hacer contacto con el balón, que se desvío en el mencionado Balboa, y se le escurrió de las manos a Bértoli para que, después de varios partidos, el Millo encuentre de carambola una buena victoria a domicilio.

De esta manera, y al igual que su rival del miércoles, Boca Juniors, River ganó y va a preparar la final con otro ánimo, ya que la sequía de triunfos, y el bajón sufrido en el juego, habían hecho sonar las alarmas en vistas a dicho partido. Sin embargo, deberá mejorar mucho si quiere coronarse la próxima semana.

Escrito por: @icedano