Jorge Molina mantiene el pulso por el ascenso directo
El cuadro burgalés completó una hora de partido casi perfecta pero la entrada del veterano ariete del Granada, que anotó un doblete, cambió el partido para los andaluces
Dolorosa derrota del Burgos CF ante un Granada (1-3) que supo dar la vuelta al partido para llevarse una importante victoria en la pelea por el ascenso, mientras que el Burgos ve escaparse una oportunidad clave para volver a meterse en los puestos de playoff a pesar de haber dominado la primera parte.
Sin embargo, un increíble Granada hizo su mejor juego en los últimos veinte minutos, comandado por un gran Jorge Molina que de nada sirvió el tanto tempranero de Gaspar Campos, pues en dos pinceladas, dio la vuelta al partido y puso muy nervioso al Burgos, que terminó con diez tras la expulsión de Mourad.
Los locales salieron desde el inicio con la intención de llevar la iniciativa del partido y tras la lesión de Torrente, pronto llegó el primer gol del Burgos.
Fue un golazo de Gaspar Campos, tras una gran jugada colectiva del Burgos en la que fue moviendo el balón con tranquilidad hasta que le llegó el balón al gijonés, que recibió desde una esquina del área y golpeó al palo largo.
Tras el gol, el Burgos tuvo controlado el partido, concediendo poco atrás y llegando, aunque sin mucho peligro mientras que el Granada no estuvo cómodo en esta primera mitad, la lesión de Torrente y el tempranero gol hicieron daño a los nazaríes.
Fueron incapaces de generar peligro en la portería de Caro, una imagen desconocida de uno de los candidatos al ascenso, mientras que el Burgos siguió intentándolo pero sin mucho peligro.
Tras el descanso, con apenas unos segundos de juego, el Burgos tuvo su primera llegada de la segunda parte pero el disparo de Bermejo se terminó yendo por la línea de fondo.
Volvió a tener hasta el dos ocasiones oportunidad de marcar el delantero burgalés, pero Bermejo no consiguió golpear el bien el balón en ambas, mientras que al Granada le siguió costando mucho llegar a portería.
Los cambios dieron algo de aire a los de Paco López y en una salida errónea de Caro, Carlos Neva elevó el balón por encima de la defensa Molina envió el balón al fondo de la red igualando el partido.
El tanto granadino igualó las fuerzas en El Plantío que se fueron repartiendo las oportunidades, pero la llegada de Molina revolucionó el partido, en apenas dos jugadas dio la vuelta el partido y en un balón en largo para Jorge Molina, centró al primer palo a Unzui, donde se anticipa a la defensa para hacer el segundo.
El Burgos terminó el partido con un jugador menos tras la expulsión de Mourad, que acababa de salir al terreno de juego, pero el árbitro vio intencionalidad en la pierna del marroquí sobre Cabaco tras consultarlo en el VAR.
El añadido tuvo constantes paradas de juego, con muchas faltas y protestas que llevaron a añadir hasta 8 minutos y, cuando el partido estaba ya muriendo, el Granada robó un balón y en un cuatro contra dos, Molina ajustó el balón al palo para hacer el tercero.