Tres puntos para estar arriba en el Nou Estadi

Pretemporada acabada, mercado acabado y tercera jornada de competición a la vista. Ya es momento de empezar a rodar en velocidad crucero para asentar objetivos en una competitiva categoría. El Nàstic llega invicto (un triunfo y un empate) y quiere su segunda victoria ante su afición para asentarse en una zona alta a la que aspira a final de curso. Por su parte, el Barça Atlétic viene de vencer en casa pero cayó en su primera jornada a domicilio. Una inercia que quiere ahora cambiar en el Nou Estadi para acercarse a la parte alta de la clasificación.

Nàstic: no conceder en casa

El primer partido como visitante del Nàstic de Dani Vidal dejó buenas sensaciones. A pesar de que los grana marcharon con sólo un punto en el bolsillo. En los últimos años, un tema que ha traído más de un quebradero de cabeza a los granas han sido los duelos como visitante. Desde la creación de la Primera Federación se ha establecido entre los equipos la importancia de ser regulares en su estadio y, los más consistentes como visitante, son los que se permiten luchar por las posiciones elevadas. Ahora toca enfocarse en la primera parte, ser regulares en casa donde empezaron imponiéndose al Arenteiro. Con cuatro puntos en el casillero, los tarraconenses ocupan puesto en una zona noble en la que se quieren asentar haciéndose fuertes en casa después de una temporada pasada no exenta de sustos y en la que acabó salvando los muebles, después de contabilizar un total de tres técnicos diferentes.

Las palabras del míster

Barça Atlètic: un triunfo para estar arriba

El Barça Atlètic se presentaba al inicio de curso como uno de los candidatos a poblar la parte alta de la clasificación después de que el curso pasado se quedase fuera de la carrera por el ascenso en la primera eliminatoria del playoff. Las cosas empezaron con mal pie cayendo a domicilio ante la SD Logroñés, pero, ya en casa, los blaugranas sumaron los tres primeros puntos del curso a los que ahora quieren dar continuidad para acercarse a una zona de la tabla a la que aspiran a final de curso. Para ello el Barça B desenfundó la cartera para hacerse con utbolistas como es el caso de Mikayil Faye, central senegalés de 18 que llegó procedente del NK Kustosija croata por 1,5 millones de euros. Sin ir más lejos, Xavi Hernández ya lo hizo debutar en pretemporada. Con una plantilla casi renovada, Rafa Márquez presentó un equipo sólido y dominante con la pelota, siguiendo una receta que el año pasado lo llevó a disputar el play-off de ascenso a Segunda División.