Dimitrievski seca al Real Madrid
El Real Madrid perdona demasiado ante un Dimitrievski imperial. El Rayo saca así un punto valiosísimo del Santiago Bernabéu.
El Real Madrid llegaba a este encuentro con el objetivo de alcanzar al Girona en lo más alto de la clasificación, pues el cuadro catalán hizo los deberes y ganó a Osasuna para dormir líder en solitario. Por otra parte, una victoria le serviría al Rayo para alcanzar al Betis en puestos europeos. Apostaba Ancelotti por Modric, tras sus buenos minutos en el clásico, y por Joselu en punta, mientras que Francisco colocaría en punta a un viejo conocido en Chamartín: RDT.
Primera parte de menos a más para el Madrid
A los cinco minutos llegó la primera ocasión clarísima para los merengues. Fede Valverde robaba un pase horizontal entre los defensores rayistas y se plantaba solo ante Dimitrievski, que conseguría mandar con un paradón a saque de esquina el tiro del uruguayo. Tampoco aprovecharían el corner posterior. Poco después saltaría las alarmas en el banquillo madridista. Jude Bellingham se tropezaba él solo y pediría asistencia médica. Saltaría al campo incluso la camilla para llevarse al inglés, que finalmente pudo levantarse y continuar el partido.
La primera parte iba transcurriendo con dominio blanco pero sin ninguna oportunidad clara de peligro destacable. Andaba el Madrid impreciso en el último pase, mostrando facilidad para internarse en el área visitante pero a la hora de a verdad la defensa cortaba el peligro con facilidad. Más allá de algún contrataque aislado, al Rayo le estaba siendo muy complicado tener posesión más allá de zona de tres cuartos.
Hasta pasados los primeros veinticinco minutos de partido no pudimos ver más tiros con peligro sobre el arco de Dimitrievski. Primero un cabezazo de Joselu a un saque de esquina botado por Modric que se marcharía cerca del palo, y en la siguiente jugada de nuevo otro tiro de Joselu, esta vez más desviado, desde el balcón del área. Parecía que se iba animando el Madrid, o que a la defensa del Rayo cada vez le iba costando más achicar el agua.
Otro gran pase de Bellingham iba a acabar con un tiro alto de Fran García, que estaba demasiado escorado como para atinar mejor, seguido de otro tiro de Vinicius que correría la misma suerte. Parecía que el último pase empezaba a funcionar, ahora faltaba la puntería en el tiro. Asedio total. Vinicius era un dolor de cabeza en la banda, con regates constantes que le metían hasta la cocina, pero sus tiros siempre se encontraban con las manoplas de un Dimitrievski que hoy se ganó el sueldo. En otra clarísima, el brasileño le cedió el cuero a Bellingham cuyo disparo a bocajarro se volvió a encontrar con el guardameta rayista.
La primera parte acabaría con empate sin goles y con mucho que ajustar en las filas visitantes, que veían como en la recta final de la primera parte la defensa empezaba a hacer aguas y solo se estaban salvando o bien por falta de puntería local o por las apariciones estelares de Dimitrievski.
Asedio sin premio gracias a Dimitrievski
La segunda parte comenzaría como acabó la primera. En la primera posesión merengue se pasearía por la portería un gran centro de Modric que no llegarían a rematar ni Vinicius ni Bellingham. En esa misma jugada las asientencias tendrían que salir a mirar a Dimitrievski, ya que Vinicius se lo come yendo a por el remate. Solo fue el susto.
El toma y daca blanco continuaba, esta vez se iba a marchar fuera un cabezazo de Joselu tras un contrataque perfectamente conducido por el pajarito Valverde que, tras lograr irse de varios rivales, vería como su centro no sería rematado entre los tres palos. Tras un cuarto de hora de segunda parte, Francisco empezaba a mover el banquillo para tratar de contener las embestidas, hasta ahora estériles, del Real Madrid.
El Rayo sacaría su primera ocasión con cierto peligro mediados ya veinte minutos del segundo acto, en una acción que acabaría con un despeje de la defensa a saque de esquina que a la postre despejaría bien la zaga blanca. Poco después llegaría el gol de Vinicius, anulado por fuera de juego previo de Joselu. El Madrid no conseguía adelantarse y era el turno de Ancelotti para mover ficha. Rodrygo y Kroos cogerían el testigo de Modric, ovacionado, y Fran García para volcarse aún más en ataque. Sería el propio Rodrygo el que tendría de las ocasiones más claras de los que iba de segunda parte, con un tiro que se iría por centímetros tras una buena jugada entre Valverde y Carvajal en banda derecha.
Para los últimos quince minutos el Rayo decidiría meter pólvora arriba, Falcao y Bebé entraban de refresco pensando en posibles contras que el Madrid pudiera ceder en la recta final. Al Madrid empezaban a entrarle los nervios. Minuto ochenta y aún campeaba el empate a cero en el marcador. En el partido ahora se turnaban las pérdidas de tiempo visitantes con los pases precipitados de los locales.
Los último instantes de partido sería un asedio constante a la portería de Dimitrievski, con saques de esquina, libres directos… de todo menos goles. Muy precipitados los de Ancelotti que veían como el tiempo se agotaba y tendrían que depositar todas sus esperanzas en los siete minutos que añadía el cuarto árbitro. No faltaría tangana final en la que Dimitrievski se llevaría la amarilla tras enzarzarse con los jugadores del Madrid. Y así se consumirían los minutos finales, así como la paciencia del Real Madrid, que consumaría un empate a medias entre su falta de acierto y las buenas paradas de Dimitrievski.
Por tanto, el Real Madrid se queda con 29 puntos y se queda sin liderato, mientras que el Rayo suma 18 en novena posición. La próxima jornada el Madrid recibirá al Valencia y el Rayo al Girona.
