El renacimiento de Rodrygo
El futbolista brasileño ha resurgido de sus cenizas para liderar el ataque blanco antes las múltiples bajas
La del Real Madrid está siendo, sin lugar a dudas, una temporada de contrastes. Unos contrastes que se hace evidente al comparar los buenos resultados que el conjunto blanco ha cosechado en estos primeros meses de campaña, ostentando el liderato tanto en competición nacional como europea, con las lesiones que tienen en jaque a un Carlo Ancelotti que tiene que hacer auténticos malabares para conformar un hombre.
Unos contrastes que también se dejan ver al echar un vistazo al rendimiento de algunas de las piezas claves del conjunto blanco. Si bien algunos como Jude Bellingham atraviesan un estado de gracia, de la mano de unas actuaciones estelares y unas cifras estratosféricas, otros como Rodrygo han mostrado un nivel muy inferior al de anteriores campañas.
El ‘clic’ de Rodrygo y dos meses para reivindicarse
El jugador carioca ha firmado el peor arranque de una temporada desde que viste de blanco a nivel no solo goleador, sino también futbolístico. Negado de cara a puerta, y con una influencia nula en el juego del conjunto blanco, fueron cientos de aficionados los que reclamaban un banquillazo para el brasileño en detrimento de Rodrygo.
Una situación que llegó a extrapolarse para Rodrygo incluso fuera del campo, llegando a asegurar fuera del verde que no le gustaba la posición de ‘9’, pero en el Real Madrid no tenía otra opción. Sin embargo, no hay mal que por bien no venga, y de la mano de las hasta ocho bajas que acumula el conjunto blanco, han sido futbolistas como el brasileño los que tenían que dar un paso al frente.
Y vaya si lo ha hecho. En el encuentro liguero frente al Cádiz, en el que Rodrygo iba a partir desde el banquillo antes de la indisposición de Brahim Díaz, el brasileño firmó su mejor actuación de la campaña. Lideró el ataque del Madrid desde el flanco izquierdo, cubriendo el hueco de su compañero y amigo Vinicius, y anotó dos goles y dio una asistencia.
Una actuación con la que Rodrygo demostraba que ese futbolista desequilibrante que enamoró a Carletto aún sigue ahí. Y tiene dos meses, hasta el regreso de Vini, para demostrar que es capaz de liderar a todo un Real Madrid desde el flanco izquierdo. Eso sí, para cuando Vinicius regrese, tendrá que demostrarlo también desde cualquier frente del ataque blanco, ya que esa posición tiene dueño y señor. Pero, por el momento, el brasileño ya se postula como el líder del ataque blanco hasta, como mínimo, febrero.