El Córdoba es arrollado por el Oviedo
Un nuevo festival de goles se dio en el Arcángel, pero dando esta vez una victoria a domicilio al Real Oviedo, que supo aprovechar todos los errores defensivos blanquiverdes y superar a su rival sin ser superior en el juego.
Un encuentro donde ambos conjuntos llegaban tras un empate en su casillero iba a comenzar con los dos equipos queriendo la posesión y presionando muy arriba. Tanto los pupilos de Sandoval como los de Anquela querían sus primeros tres puntos y sabían qué debían hacer para encontrarle las cosquillas a sus rivales.
Saúl Berjón golpea primero y pronto
Ante tanta presión defensiva y los nervios primeros, la primera ocasión clara del encuentro se convertiría en la que abriría el marcador. Después de un saque de falta desaprovechado por los blanquiverdes, Bárcenas y Saúl Berjón salían a la carrera en una vertiginosa contra. Tras deshacerse de varios rivales, el panameño dejaría al ’10’ oviedista solo ante Stefanovic, quien conseguiría tocar el esférico pero no lo suficiente para evitar el primer tanto de la noche.
Tal vez fuese el gol o los nervios por todo lo que rodea aún al equipo, pero el Córdoba CF no se sentía cómodo sobre el césped. Los pases no eran precisos y se perdían balones constantemente, algo que le estaba pasando factura a la hora de intentar sacar el balón desde la defensa. Bambock se veía sobrepasado y los centrales estaban teniendo mucho trabajo con una presión tan asfixiante.
Pese a todo, el Oviedo empezaba a perder fuerza conforme iban pasando los minutos y la fuerza del Arcángel iba dando a los locales esas ganas y buen hacer de los últimos tiempos. Esto estaba sacando de quicio a los de Anquela quienes empezaban a realizar cada vez más entradas a destiempo o excesivamente agresivas.
Bárcenas machaca al Córdoba
Todo parecía llevar a los cordobesistas al gol del empate pero el parón para hidratarse por altas temperaturas no le vendría nada bien. Anquela sabría aprovechar esta pausa para reubicar a los suyos, algo que aprovecharían sin lugar a dudas en cuanto sonara de nuevo el pitido del colegiado.
En una jugada con polémica, donde los blanquiverdes pedían mano, Bárcenas le iba a sacar provecho al desajuste de la defensa local, quien solo miraba al árbitro vasco, mientras el panameño se posicionaba ante Stefanovic una vez más y lo batía sin ningún miramiento.
El público cada vez estaba más tenso ya que veían como Gorka Saguéz podía estar beneficiando a los visitantes. Distintas posibles manos, faltas fuertes que incluso llegaron a provocarle sangre a Alfaro, entre otras cosas, estaban sacando de quicio a una afición que ya no miraba con tanta atención el juego sino si se le estaba perjudicando a su equipo.
Sandoval buscaba soluciones antes de ser expulsado
El segundo tanto del Oviedo haría que el técnico de Humanes no aguantara más y pondría a calentar Jaime Romero, aunque no le daría tiempo de poder verlo sobre el césped ya que sería expulsado sin razón aparente al borde del descanso, algo que haría desesperaría por completo a todo el estadio cordobesista.
De igual forma el plan ya estaba en marcha y eso no lo iba a cambiar ya nadie. El Córdoba CF iba a salir con otra mentalidad tras el descanso, mucho más agresiva y ofensiva, algo que se notaría pronto en el marcador. Los centros desde las bandas estaban siendo la tónica del conjunto blanquiverde y eso tendría su resultado final. En un nuevo centro desde la banda izquierda, Javi Lara si encontraría esta vez a su socio perfecto, Alfaro. Los dos capitanes blanquiverdes se asociarían a la perfección para que el ’10’, quien llevaba el brazalete esta noche, consiguiera batir a Herrero con un gran cabezazo al segundo palo.
Respuesta rápida del Oviedo
Las cosas empezaban a pintar bien para los locales al final, pero en el fútbol nada está asegurado hasta el final y si querían remontar iban a tener que hacer un gran esfuerzo. Los nervios por el gol marcado y las ganas de seguir adelante les iban a jugar una mala pasada, y con tantos jugadores arriba descuidarían la defensa una vez más.
En una jugada donde el Oviedo estaba jugando a sus anchas al borde del área sin que nadie le defendiese realmente, Johannesson entraría por la banda derecha como una flecha y, aprovechando la fuerza que llevaba, pondría un gran pase al segundo palo sin que nadie se molestase en tocar el balón, dejando a Saúl Berjón una vez más a puerta vacía para poder alejarse de nuevo en el marcador.
Piovaccari levanta a los suyos y Barcenas sentencia
Una de las cosas que tal vez estaba echando en falta el Córdoba sobre el terreno de juego era la referencia de un ‘9’ puro como referencia. La entrada del italiano le iba a dar más guerra a los centrales del Oviedo, especialmente Carlos Hernández quien lo sufriría en el gol. En una jugada donde Alfaro introducía un gran pase entre los centrales, Piovaccari iba a conseguir zafarse en primera instancia del central oviedista, quien vería en primera fila como el delantero blanquiverde iba a marcar su primer gol esta temporada, acercando así a los suyos una vez más en el marcador.
Pero la historia de la noche era la reacción constante del Oviedo a cada acometida del Córdoba, más por demérito local que por un gran juego de los azulones. Un nuevo contraataque de los de Anquela llevaría al panameño Barcenas a encarar la portería de Stefanovic una vez más, quien ni haría el intento de evitar el cuarto gol visitante.
Cualquier esfuerzo por remontar había sido suprimido y la moral blanquiverde había sido pisoteada por un contundente y eficaz Oviedo. Pero aún así Piovaccari tenía entre ceja y ceja la remontada, por lo que conseguiría sacar un penalti para los suyos, aunque Herrero detendría la pena máxima ejecutada por Aguado, dando paso definitivamente al 2-4 final.