En Lugo, de momento, el gol está repartido
Cinco goles han anotado los albivermellos en las 3 primeras jorandas y cada uno tiene una firma distinta
El gol ha sido un tema redudante en las últimas temporadas en Lugo. Ya bien fuese por tener al pichichi de la competición, como por sufrir de escaseza ofensiva. La realidad es que desde hace dos temporadas, cuando se hicieron 49 goles, 23 con la firma de Joselu, en el Lugo ha faltado un hombre gol.
El curso pasado el equipo tuvo un balance goleador de 39 tantos a favor, 10 menos que en la 16/17, y 48 en contra. En lo referente a lsa 39 dianas conseguidas, no hubo un goleador claro. Hasta 17 jugadores vieron puerta el curso pasado. Un dato que por sí solo no es malo pero que si repasamos las cifras vemos la clara falta de un hombre referente arriba.
Y es que los 39 goles se repartieron de la siguiente manera: el pichichi fue Cristian Herrera con 7 tantos, muy lejos de los 23 de Joselu; con cinco están Mario Barco e Iriome; 3, Fede Vico y Pita; 2, Azeez, Jaime Romero, Campillo y Escriche; y con 1 tanto en su cuenta están jugadores como Chuli, Polaco, Juan Carlos, Ignasi Miquel, Bernardo, Seoane, Luis Ruiz y Albarracín.
Esta temporada, la cuenta goleadora en estos tres partidos asciende a cinco tantos. Los cinco tienen una firma distinta. Hasta ahora han marcado Campillo, Lazo, Aburjania, Iriome y Cristian Herrera. Es pronto para sacar conclusiones pero de momento el gol sigue estando repartido, de momento.
Premio al compromiso
El CD Lugo anunciaba este martes las renovaciones de los jugadores Iriome González, Carlos Pita, Fernando Seoane y Cristian Herrera. El conjunto rojiblanco ha extendido el contrato de Iriome una temporada, por lo que expirará en 2022 en lugar de 2021. Los otros dos capitanes del equipo, Pita y Seoane, se han comprometido con la entidad lucense hasta 2021. Ese mismo año acabará su contrato el delantero Cristian Herrera, que llegó al equipo la temporada pasada.
Este lunes, el presidente del Lugo, Tino Saqués, y el director deportivo del club, Emilio Viqueira explicaron que nueve jugadores aceptaron rebajarse el salario para que todos sus compañeros pudieran ser inscritos porque el equipo había superado el tope salarial que le concede LaLiga y señalaron que, como contrapartida, algunos iban a ampliar sus vínculos. Algo que se confirmó al día siguiente con este anuncio.