El Mirandés al asalto de Ganzábal

Dos conjuntos invictos. Dos escuadras que suman la mitad de los puntos, seis, de los posibles, doce. En Ganzábal se encontrarán esos dos que buscarán mantener sus rachas y continuar sumando e invictos una jornada más. Esos son el Unión Popular de Langreo y el Club Deportivo Mirandés.

El encuentro será dirigido por el colegiado orensano Fernández Rodríguez. Un veterano de la categoría que con esta suma su cuarta temporada dirigiendo en la categoría de bronce. Será la primera vez que dirija al cuadro asturiano, pero no al Mirandés. Precisamente al cuadro rojillo le dirigió en otra visita a Asturias de no muy buen recuerdo. Fue la temporada pasada frente al Sporting ‘B’ en un partido en el que, además de caer derrotado, acabó con nueve jugadores sobre el terreno de juego.

El cuadro asturiano regresa a su campo tras empatar la semana pasada en Zubieta. En tierras vascas logró un trabajadísimo empate frente al filial donostiarra que tiene un gran valor. Los de Hernán Pérez quieren redoblar el valor de ese punto venciendo en su feudo a uno de los principales candidatos al ascenso del grupo. Eso sí, el técnico ovetense seguirá contando con notables bajas en la parte del ataque. Siguen sin estar disponibles por lesión Pablo Acebal, Allyson y David González.

La parte positiva la ponen Nacho Calvillo y Álvaro Cuello. El donostiarra regresa al equipo tras cumplir los dos partidos de sanción que le fueron impuestos. Más importante es el regreso de Cuello que ya ha superado su rotura de ligamento cruzado que le ha tenido inédito en todo el año 2018. Ambos, además, tienen serias opciones de volver al equipo como titulares.

En el cuadro rojillo la sensación es de que el equipo tiene muchos menos puntos de los que merece. Se progresa semana a semana, pero a excepción de la goleada en Durango, el cuadro mirandesista no ha logrado más resultados positivos. Para este encuentro Borja Jiménez tiene las bajas de Pito Camacho y de Álvaro Bravo. Éste último aún no ha podido debutar con la camiseta rojilla por diversos problemas en el tobillo.

El abulense restaba importancia a la superficie sintética que se encontrará su equipo en Langreo. Entiende que ya se adaptaron perfectamente en las anteriores salidas a Estella y Durango. «Debemos adaptarnos rápido a la superficie […] Si es cierto que les he visto en directo y me parece un terreno más irregular que, por ejemplo, el de Durango».

Pero si hay algo que le impone más respeto al técnico es la dinámica de los langreanos. «Tendremos enfrente a un equipo que aún no ha perdido y que llega con esa dinámica positiva de algunos de los equipos que ascienden». La actual dinámica de resultados no supone motivo de preocupación. «Si es cierto que estamos un poco al revés de eso que llaman la media inglesa. Ganamos en Durango, empatamos en casa con el Barakaldo y ahora vamos a Langreo con la misma intención que tuvimos en la última salida: ganar».

Un reencuentro treinta y siete años después

Han tenido que pasar treinta y siete años para que Langreo y Mirandés se hayan vuelto a encontrar en la categoría de bronce. No lo hacen desde el 22 de Marzo de 1981 cuando el cuadro rojillo logró vencer por 0-2 en el viejo Ganzábal. En total se enfrentaron en ocho ocasiones, con cuatro victorias para cada uno. Pero el partido tiene otros componentes, como es el regreso de Claudio Medina a Ganzábal. El delantero leonés fue ‘pichichi’ en Tercera División con el cuadro de Hernán Pérez en la temporada 2015/2016. Esa campaña supuso su fichaje por el Sporting y este verano por el Elche. Aunque los problemas del límite salarial del cuadro ilicitano obligó a su salida en calidad de cedido a Anduva.