90 minutos son «molto longo»
Las lesiones y los finales de partido preocupan en Mallorca.
Los partidos duran 90 minutos, donde cualquier detalle puede truncar el trabajo de los 89′ anteriores. En Mallorca se empieza a dudar del físico de los jugadores. Se pone en entredicho la capacidad de aguantar todo el partido por parte de ciertos jugadores.
Lesiones y algún momento en el que se ve a los jugadores asfixiados han encendido las alarmas en la isla de la calma. Raillo, Salva Ruiz, Manolo Reina, Valjent, Estupiñán, Sastre y Buenacasa han causado baja por problemas físicos durante este año. Los dos últimos en la pretemporada y de larga duración. El número es elevado y ha condicionado el inicio de los baleares. La cantidad de lesiones han obligado a Vicente Moreno a improvisar defensas inéditas, en Lugo tuvo que apostar por una pareja formada por Franco Russo y Martin Valjent.
Las lesiones han mermado al Mallorca pero el nivel de competitividad interna han provocado que el sustituto ofrezca un nivel igual o superior al teórico titular, de hecho, Russo sustituyó a Raillo en La Romareda y el argentino fue capaz de hacer olvidar a una pieza clave dentro del esquema bermellón.
Por otro lado, los bermellones han demostrado una falta de resistencia preocupante. Los partidos se hacen bastante largos y a estas alturas de la temporada es un síntoma que no debería aparecer. De hecho, ya se empieza a acercar el momento del pico de forma que suele abarcar de diciembre a enero. En el partido ante el Zaragoza, el equipo dejó escapar una renta de dos goles y en la segunda parte se pudo observar un equipo mermado fisícamente y parecía que los maños iban un punto por encima.
El problema es evidente, jugadores como Lago Junior o Aridai no son capaces de rendir los 90 minutos. Aunque si que es verdad que son jugadores que se exprimen en todas las facetas del juego y desgasta mucho a nivel físico, pero que en los finales de partido desaparecen y dejan mucho espacio a sus espacios que los rivales aprovechan para afrontar un dos contra uno ante los laterales. Sin embargo, el compromiso y la actitud parece absorver ese problema, pero no se tiene que evadir la realidad, al Mallorca se le hacen largos los partidos y es algo a solucionar.